Desde la llegada de Hansi Flick al FC Barcelona, Robert Lewandowski no ha escatimado en elogios hacia su nuevo técnico, y hoy en Mestalla, el ariete polaco convirtió esas palabras en hechos. Con un doblete magistral, Lewandowski dio la vuelta a un partido que se presentaba cuesta arriba para los blaugranas tras comenzar perdiendo. Pese al resultado favorable, el conjunto catalán exhibió los mismos defectos que le costaron el puesto a Xavi: posesión estéril, una defensa endeble y una dependencia excesiva de la brillantez individual, que esta vez se manifestó en Mestalla.
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Barcelona sigue con fallas estructurales
No todo son buenas noticias para el Barça. Los problemas estructurales del club siguen pasando factura en el terreno de juego. Llegaron a su debut liguero sin poder inscribir a Dani Olmo y alinearon a dos canteranos, Bernal y Casadó, debido a la falta de efectivos. A lo largo del partido también se vio obligado a dar entrada a otro juvenil, Martín.
Ambiente electrizante en Mestalla
Mestalla colgó el cartel de "no hay billetes" a mitad de semana y los 38.000 abonados no faltaron a la cita, creando un escenario vibrante. El Valencia CF salió con el ímpetu que exigía la ocasión. Mientras el Barça mantenía posesiones planas que no generaban peligro, los che aprovechaban cualquier fallo para lanzarse en contraataques fulminantes con Hugo Duro y Rafa Mir, una dupla que se entiende cada vez mejor.
Primera mitad frenética
En una acción rápida, Diego López mostró su clase y precisión olímpica. Hizo leña de Koundé y centró para que Hugo Duro, fiel a su reputación de goleador, anotase el primer tanto del partido. La explosión de júbilo en Mestalla fue inmediata. Sin embargo, un error en la búsqueda del segundo gol permitió que el Barça se volcara en ataque.
Lewandowski al rescate
El talento barcelonista emergió en medio del caos. Alejandro Balde puso un centro milimétrico que Lamine Yamal convirtió en oro puro con una asistencia brillante a Lewandowski, quien solo tuvo que empujarla. El gol llegó como un jarro de agua fría para los locales y revivió al Barça justo antes del descanso.
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Segundo acto: Dominio Culé
El gol al filo del descanso revitalizó al Barça. Tan solo 30 segundos en la segunda mitad y Lamine Yamal perdonaba a Mamardashvili con un remate cerca del punto de penalti. No más de un minuto después, Raphinha, en una jugada inteligente, forzó un penalti sobre Mosquera, que el impasible Lewandowski convirtió con una precisión quirúrgica. Ni el mismísimo Casillas en su mejor época podría haberlo detenido.
Polémicas y desesperación
Un momento crucial generó controversia: el colegiado no mostró la segunda amarilla a Pau Cubarsí por una falta sobre Hugo Duro, provocando la ira en la grada. Flick reaccionó rápido para evitar peores consecuencias y sustituyó a Cubarsí apenas tres minutos después.
Tranquilidad en el ocaso del partido
En la parte final, el partido perdió intensidad. Entre el cansancio acumulado y los jugadores aún buscando su mejor forma, el FC Barcelona supo administrar su ventaja. Los cambios de Baraja para levantar el marcador, con los debutantes Otorbi y Martín Tejón, y jugadores como Hugo Guillamón y Foulquier, no lograron encender una remontada.
Ficha técnica:
Valencia CF | Mamardashvili; Thierry, Mosquera, Yarek, Jesús Vázquez (Otorbi); Rafa Mir (Martín Tejón), Pepelu, Javi Guerra, Diego López (Foulquier); Almeida (Dani Gómez) y Hugo Duro. |
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FC Barcelona | Ter Stegen; Kounde, Cubarsí, Íñigo Martínez (Christensen), Balde (Martín); Casadó, Bernal (Eric García), Lamine Yamal, Ferrán (Pedri), Rapinha y Lewandowski. |
Goles:
- 1-0, Hugo Duro (44′).
- 1-1, Lewandowski (45+4′).
- 1-2, Lewandowski (47′).
En resumen, Mestalla vivió una noche cargada de emociones donde Lewandowski se erigió como el héroe, guiando al Barça a una victoria trabajada en un ambiente de auténtico fútbol.