Santiago Cañizares, ícono del Valencia CF y crítico incansable de la gestión de Peter Lim, ha levantado una vez más la voz desde sus redes sociales sobre la turbulenta situación del club che tras el despido de Baraja.
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El exguardameta no ha escatimado en palabras para describir sus sospechas ante el reciente cambio de rumbo. «Es más raro que un perro verde ver cómo el Valencia ha pasado de no gastar ni un duro a desembolsar de golpe el finiquito del ‘Pipo’, sin olvidar la cláusula de liberación de Carlos Corberán», señaló Cañizares con evidente escepticismo.
Una Inversión Inesperada
El técnico español, que hasta ahora dirigía al West Bromwich Albion en la Segunda División inglesa, llega con todo su equipo a Mestalla y, lo sorprendente, con promesas de fichajes en el mercado de invierno. Algo huele a chamusquina en esta historia y el exarquero no titubea: «Debe haber gato encerrado», desliza con un tono cargado de dudas.
El Giro Inusitado del Valencia CF
El cambio radical respecto a la gestión del entrenador ha levantado ampollas. Cañizares, en su forma inimitable de comentar los entresijos del fútbol, expresa su incredulidad ante lo que califica como una jugada maestra que oculta una agenda oculta. «No me creo a Corona siendo generoso con Baraja y al mismo tiempo aflojando la billetera por un nuevo contrato extendido hasta 2027. La mano que mece la cuna debe saber muy bien lo que está haciendo», añadió el exjugador con un punto de ironía.
Meriton y la Sombra de una Venta
Para Cañizares, la trama parece una estrategia orquestada para allanar el camino a una futura venta del Valencia, una teoría que, para sorpresa de muchos, resonó con fuerza después de las recientes declaraciones de Layhoon tras la ‘no Junta de Accionistas’. «Si una oferta tentadora aterriza en la mesa, se valorará», confirmó.
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El exguardameta ve en esta situación un camino diseñado que, sumado a las maniobras económicas, apunta a una nueva propiedad del club. «Todos los caminos, como las rutas de un ajedrez bien jugado, llevan hacia un futuro con nuevos dueños. Y los resultados sobre el césped están acelerando esta operación que ya tiene tono de urgencia», concluyó Cañizares dejando en el aire un halo de anticipación.