Universidad de Chile tropieza en El Salvador
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Universidad de Chile sufrió un revés en su ilusionante camino en la Liga de Primera 2025. Los azules, que buscaban romper la maldición que los acompaña en el Estadio El Cobre de El Salvador desde hace nueve años, volvieron a caer ante Cobresal, esta vez por un estrecho 2-1. La historia parece repetirse para el equipo universitario, que sigue sin poder encontrar la fórmula mágica para salir victorioso de la altura del norte chileno.
Di Yorio, la esperanza y la autocrítica
Lucas Di Yorio, quien logró empatar momentáneamente el marcador, no pudo evitar el sabor amargo tras el encuentro. Con un tono de resiliencia, compartió sus sensaciones: “Fue un golpe que no esperábamos”, confesó con una mezcla de sorpresa y determinación. “Recién estamos comenzando el año, hay que seguir puliendo detalles. Estamos encaminados, pero necesitamos mejorar mucho más”, señaló en conferencia, siempre con la vista puesta en el futuro.
El próximo desafío: Unión Española
El artillero azul puso su mirada en el siguiente escollo: “Esta semana nos viene bien para enfrentar el partido con Unión Española con total seriedad y volver a sumar de a tres para acomodarnos”, analizó Di Yorio con franqueza. “Es un rival duro, intenso y agresivo; no va a ser nada fácil”. La referencia deja entrever que el duelo promete ser un verdadero clásico de fuerzas desatadas.
En sus palabras finales, el delantero delineó la estrategia que podría llevarlos al triunfo: “Será vital que dominemos los duelos individuales. Debemos ser intensos, ordenados y claros en nuestra propuesta ofensiva. Por momentos puede salir o no, pero la idea es dominar el juego por completo”, añadió, dibujando una hoja de ruta que resuena en cada aficionado azul.
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Polémica con las calcetas: una nueva norma
Finalmente, Di Yorio no eludió la controversia que sacude al equipo. Leandro Fernández, Gonzalo Montes y Nicolás Ramírez fueron sancionados con tarjetas amarillas administrativas tras ser sorprendidos en el partido contra Unión La Calera con medias cortadas, una medida poco usual pero que invita al orden estético y reglamentario del certamen.
Ante la sorpresa del ariete, quien dijo: “No sabía que había tarjetas administrativas”, es evidente que esta normativa ha sorprendido a propios y extraños en la competencia local. “Si la ley lo dice así, habrá que acatarlo y jugar con las medias de un color. Yo uso medias cortadas, pero no pasa nada. Cambiaremos de color y listo”, dijo Di Yorio con un aire de resignación y aceptación.
Los universitarios miran hacia el horizonte, conscientes de que el camino recién comienza, y aunque tropezar es parte del juego, levantar la cabeza con orgullo es el verdadero arte de este deporte. ¡Vamos la U!
