La relación entre Universitario de Deportes y Raúl Ruidíaz parece haber llegado a su punto más álgido, como cuando un partido se decide en el último minuto. Los ‘cremas’ han tomado la drástica decisión de eliminar todas las imágenes de la ‘Pulga’ de sus instalaciones, tanto del museo del estadio Monumental como de Campo Mar. Una maniobra que ha causado un terremoto emocional entre los hinchas.
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La chispa que encendió el conflicto
Fue Daniel Amador, el Gerente de Marketing de la ‘U’, quien puso las cartas sobre la mesa al revelar el motivo de esta ruptura. Todo comenzó tras una polémica publicación de Ruidíaz en su cuenta de Instagram, que los fanáticos interpretaron como una burla luego de la dolorosa derrota 4-0 frente al Palmeiras en la Copa Libertadores. La historia incluía una canción de reggaetón titulada “Quiero ponerte en cuatro”, y eso cayó como un balde de agua fría.
El eco de las palabras
Los hinchas lanzaron críticas despiadadas, pero Raúl no tardó en dar la cara, asegurando que nunca haría daño al equipo que lleva en el corazón. Como un delantero que se defiende frente a una defensa implacable, estuvo firme en su posición.
“Yo creo que cada uno cosecha lo que siembra; todos como personas cosechamos lo que sembramos", sentenció Amador, al tiempo que recalcaba el respeto que merece la institución. “La ‘U’ es más grande que cualquier tropezón y eso se ha demostrado de una manera clara en estos años”.
El sentir del vestuario
Edison Flores, conocido como el ‘Orejas’, también se pronunció sobre el episodio que sacudió a Universitario. “Algunos compañeros se sintieron aludidos, pero eso no quita que Raúl sea hincha de la ‘U’ y quiera lo mejor para el club”, comentó con tono conciliador.
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Además, Flores aclaró rumores sobre la supuesta oposición de los jugadores al regreso de Ruidíaz. “Nosotros siempre buscamos el bien del equipo. Las decisiones vienen de más arriba, y aunque hubo negociaciones, al final no se concretaron”.
La historia entre Universitario y Ruidíaz es un partido que aún no ha concluido. En el fútbol, como en la vida, cada jugada puede cambiar el ritmo del encuentro. La pelota sigue rodando.
