El mercado de transferencias en Perú no deja de sorprendernos, y esta vez ha dado un giro inesperado con la salida de Cristian Benavente del Sport Boys. Este movimiento ha dejado boquiabiertos a fanáticos y expertos, pues el jugador ha optado por partir hacia el Gloria Buzau, un equipo que figura en el último lugar de la Superliga de Rumanía. En este contexto, el exjugador Reimond Manco no se ha callado nada y, con un comentario sarcástico, ha deslizado una posible razón de esta sorprendente decisión.
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Un traspaso que nadie vio venir
La sorprendente partida de Benavente ha generado todo tipo de comentarios, y en el programa ‘Rivales No Enemigos’, Manco no ha dudado en mostrar su asombro con una afirmación irónica: “Se fue el ‘Chaval’ a Rumania. Mie… su representante es Jesucristo…”، sugiriendo que la negociación fue casi milagrosa. Este comentario encapsula la incredulidad que muchos sienten acerca de la decisión del jugador.
Pero Reimond no se quedó ahí. Con el sarcasmo que lo caracteriza, cuestionó: “¿Cuántos partidos jugó el año pasado? ¿Pasó los 10?”, insinuando que Benavente no había tenido éxito ni continuidad suficiente en sus recientes actuaciones.
El peso de la camiseta rosada
En un acto de sinceridad, el ex’jotita’ Manco fue más allá, apuntando que vestir la camiseta del Sport Boys no es para cualquiera. “Jugar en Boys no es fácil. Así ganes el partido, si tu desempeño es paupérrimo, te meten unas put…das bravas”, explicó. Este comentario recuerda la intensa presión a la que son sometidos los jugadores del equipo, donde los fanáticos son exigentes y no perdonan un mal desempeño.
Para ponerle la cereza al pastel, Manco sugirió un posible motivo para que Benavente optara por irse: “Yo no voy a decir nada, solamente voy a hacer un gesto…”, haciendo un ademán que deja claro que el retorno del jugador al ámbito europeo podría ser más una estrategia para evadir la presión que otra cosa.
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¿Un paso hacia atrás o una jugada maestra?
El traslado de Benavente al Gloria Buzau, equipo que navega en las aguas turbias del descenso en la Superliga de Rumanía, puede considerarse un paso insólito para un jugador proveniente de un equipo de Primera en Perú. Como señaló Rodrigo Muente, la decisión genera desconcierto: trasladarse de un equipo como Boys, que se ha reforzado para pelear por cosas importantes, a un club que lucha por no descender es, al menos en papel, un posible retroceso.
En su debut en Rumanía, al jugar contra el FCSB, el ‘Chaval’ no pudo evitar la derrota de Gloria Buzau por 2-0, incluso cometió un penal, subrayando la difícil coyuntura que enfrenta. Es un reto grande, pero para Benavente, la oportunidad de reencontrarse futbolísticamente en el Viejo Continente puede ser la chispa que necesita para darle un giro a su carrera.
Así, el enigma de su partida queda envuelto en polémicas declaraciones, gestos reveladores y, por supuesto, un futuro incierto, pero lleno de expectativas. Solo el tiempo dirá si este arriesgado movimiento fue una jugada maestra o simplemente una mala decisión en el tablero del fútbol.
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