La tarde de fútbol en el Estadio Monumental se vistió de luto: Perú llora la partida del gigante de las letras, Mario Vargas Llosa. Durante el vibrante duelo entre Universitario de Deportes y Melgar por el Torneo Apertura, el anuncio del fallecimiento del célebre escritor a los 89 años hizo eco en todos los rincones del país, impactando profundamente a sus compatriotas y, especialmente, al mundo del fútbol.
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La noticia que sacudió al Estadio Monumental
Mientras la pelota rodaba, los periodistas de GOLPERU, en su labor incansable de llevar el partido a los hogares peruanos, no pudieron contener su tristeza. “Qué noticia esta, de una persona tan importante para nuestro país y declarado hincha confeso de la ‘U’. La verdad que es una pena tremenda. Las condolencias para la familia», exclamó Jorge Kieffer, haciendo una pausa momentánea en su narración, dejando por un instante el ir y venir del balón que hipnotizaba a los hinchas.
En el aire del Monumental, se podía palpar la sorpresa y el dolor. Alberto Beingolea, con un nudo en la garganta, añadió: “Para la familia y todo el mundo de letras en todo el mundo. [Mario Vargas Llosa] es uno de los peruanos más universales sin duda. El autor de novelas que, en lo personal, me acompañaron tantísimas horas de mi vida y a tantísima gente también».
Un legado que trasciende líneas de gol y literatura
Mario Vargas Llosa no solo nos deja una obra literaria rica y prolífica, sino también innumerables recuerdos en el mundo del fútbol. Su corazón palpitaba con intensidad por Universitario de Deportes. «La ‘U’ es mucho más que un club de fútbol, es un mito, una leyenda, una tradición», sus palabras resonaron nuevamente en el Monumental, recordando aquella noche dorada del 2 de febrero de 2011, cuando los ‘merengues’ lo homenajearon y lo confirmaron como uno de los suyos con el título de socio honorario.
El último adiós a un hincha ilustre
En medio de goles cantados y emociones desenfrenadas, la noticia de su partida dejó al Monumental en un silencio reverente, como si el mismo césped sintiera la ausencia de su fiel seguidor. Sin lugar a dudas, su pasión por la ‘U’ era tan eterna como sus palabras escritas en cada hoja de sus novelas. El fútbol peruano y el mundo literario se entrelazan hoy más que nunca, manteniendo vivo en cada línea de juego y cada página escrita el espíritu de un hombre que hizo del deporte y las letras su campo de juego ideal.
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