El fútbol es emoción, pasión y, a veces, un juego de equilibrio. Eso lo sabe bien Lucas Vázquez, quien, cada vez que el pitido inicial resuena en el Santiago Bernabéu, se convierte en una figura central del espectáculo merengue. Desde la lamentable lesión de Carvajal, el gallego ha tomado la batuta en la banda derecha, un puesto que le ha traído comparaciones con el mítico Marcelo y ha revivido el debate sobre su rendimiento defensivo. Sin embargo, ¿quién dice que su aporte en ofensiva no es igual de crucial? Es un tema que ha generado cierto runrún entre los hinchas, que valoran tanto el gol como la solidez atrás.
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Un baluarte en el ataque
En lo que va de la temporada, Vázquez no solo ha estado presente para contener a los rivales, sino que ha dejado huella al frente de forma contundente. Con dos goles, cinco asistencias y hasta dos penaltis forzados —uno ante el Liverpool y otro contra el Pachuca—, el gallego no solo compite por un lugar, sino que se establece como un juguete peligroso para las defensas contrarias. ¡Menuda carta de presentación! Ahora mismo es el décimo jugador con mayor impacto ofensivo de la plantilla de Ancelotti y el cuarto asistente más contundente, empatado nada menos que con Valverde y Brahim, superando incluso al estelar Mbappé (4 asistencias).
La discusión sobre la fortaleza defensiva de Lucas parece quedar en un segundo plano ante estos números. Como si de un baile elegante se tratara, Vázquez ha demostrado que su repertorio va mucho más allá de lo que se estila en una de esas ‘camaritas’ del fútbol. Y aunque la versión ‘Fórmula Valverde’ ha captado la atención, la preferencia de Ancelotti hacia el 17 blanco sigue siendo fiel, incluso cuando el uruguayo ha capturado algunos reflejos de titularidad en partidos clave.
Un récord como lateral derecho
La historia se ha escrito con goles y asistencias, pero también con dedicación y compromiso. Desde que Carvajal se lesionó el 5 de octubre, Lucas ha sido titular en 16 de los 19 partidos de Liga. Y, para ponerle un poco de sal a la herida de la crítica, ha sumado 10 victorias, 2 empates y 4 derrotas en esos encuentros. ¡Un récord que da para charlas en las cantinas! En los dos partidos de la Supercopa de España y la Copa Intercontinental, tampoco dejó de ser titular, reafirmando la confianza del técnico en su capacidad para liderar la defensa.
Hablando del cuadro de honor, hay que anotar que ha sido titular 27 veces esta temporada, un récord personal desde que se reconvirtió en lateral derecho, superando los 23 partidos de la 21-22. ¡Un verdadero guerrero en la batalla del césped! Pero no todo ha sido color de rosa; en la Champions, el empuje de Valverde lo ha relegado a algunas suplencias. Solo ha sido titular en cuatro partidos desde la lesión del caudillo Carvajal, y no suele arrancar en las eliminatorias; ¿será la Champions su talón de Aquiles?
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Un ícono que perdura
Es indudable que Lucas Vázquez, a pesar de ciertos cuestionamientos, ha sido una bendición para el Real Madrid, especialmente en su rol de lateral derecho. El club dio en el clavo al decidir contar con él como suplente de Carvajal. Y vaya si ha sido una jugada maestra a nivel deportivo y económico: ha renovado su contrato en dos ocasiones, en 2021 y 2024, y ahora se rumorea una nueva ampliación, lo que dependerá de la marea que venga en el mercado, incluido el posible arribo de Alexander-Arnold.
En cada jugada, en cada pase, en la forma en que se lanza al ataque como un gladiador en la arena, Lucas no solo representa a la hinchada merengue, sino que también lleva consigo la pasión del fútbol. Tal es así, que corrió por la banda en ese partido vibrante ante el Villarreal, donde dejó su huella al asistir a Mbappé para el segundo gol en La Cerámica. Esos momentos son los que alimentan el alma del hincha y lo convierten en un jugador espectacular.
La historia sigue escribiéndose, y Lucas Vázquez seguirá siendo una pieza fundamental en el juego del Madrid. No solo por su despliegue físico, sino por ese espíritu guerrero que se debate entre la defensa y el ataque, siempre en busca del gol. La temporada apenas comienza, y con cada partido, el gallego se puede consagrar como uno de los pilares del club. ¡Qué mejor que vivirlo desde las tribunas, vibrando con cada acción, cada pase y cada victoria!
