En el inicio de su carrera, el Tiba Sepúlveda fue visto como la nueva estrella defensiva de las Chivas de Guadalajara, mostrando la garra y liderazgo que prometían hacer de él un pilar inamovible en el conjunto rojiblanco.
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Sin embargo, a medida que avanzaban los torneos, el destino le jugó una mala pasada. Sepúlveda, como un barco en alta mar sin brújula, perdió la confianza y eventualmente su lugar en el once titular. Esta situación desgastó su relación con el cuerpo técnico y la directiva.
El cambio: un nuevo ciclo para Sepúlveda
De acuerdo a las informaciones más recientes, tanto el jugador como el club están de acuerdo en que una salida es lo que más conviene a ambas partes. Chivas busca seguir creciendo, mientras que Sepúlveda necesita oxigenar su carrera.
Destino incierto: ¿Cruz Azul?
Un rumor que suena fuerte en el mundo del fútbol es el interés de la Máquina de Cruz Azul por el zaguero. Sepúlveda podría cambiar su camiseta y mudarse a la capital, una jugada que podría redefinir su futuro.
El desafío de dejar el nido
Aunque ya hemos hablado de las razones que empujan a Tiba Sepúlveda a dejar Chivas, no será fácil. Su contrato con el club se extiende hasta junio de 2028, creando un enigma que solo el tiempo podrá resolver.
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Con un valor de mercado estimado en 4 millones de dólares según Transfermarkt, el desafío no es menor. Sepúlveda ha disputado 194 partidos con la camiseta rojiblanca, y ha celebrado seis goles, dejando una huella imborrable.
En la constante búsqueda del éxito, esta podría ser una oportunidad para redescubrir esa chispa que alguna vez lo definió. Como dicen, después de la tormenta viene la calma, y quizás, para Tiba, el arco iris está en el lugar menos esperado.
