Tano Ortiz, el mago del banquillo que dejó huella en la Liga MX, está listo para renacer como el ave fénix en el firmamento del fútbol mexicano. Tras su salida de Rayados de Monterrey, Ortiz vuelve a estar en la palestra y ha sacado su carta de presentación: su talento como estratega, ahora disponible para cualquier equipo que quiera apostar por un juego apasionante y estratégico.
¿Qué equipo es posible destino para Tano?
Santos Laguna, un equipo que está más inestable que un carrito de helados en una montaña rusa, ve al Tano Ortiz como una de las principales aspiraciones para reemplazar a un Nacho Ambriz que no logra enderezar el rumbo. Aunque Ortiz fue jugador en el equipo lagunero entre 2007 y 2009, ahora podría regresar no para sudar la camiseta, sino para dirigir desde la línea de cal. «Santos es un lugar especial para mí», declaró Tano, reflejando la añoranza y la esperanza de volver donde dejó una huella imborrable.
Diego Cocca, una opción más en el horizonte
En la sopa del fútbol, también suena el nombre de Diego Cocca, otro argentino que tiene las credenciales bien pulidas tras su brillantez con el Atlas, donde logró el bicampeonato. Cocca, que tuvo una breve estadía de 14 partidos en el Santos durante 2010, podría volver para intentar escribir otro capítulo glorioso en su carrera. La competencia entre él y Ortiz es más tensa que un penal en tiempo de descuento.
El América y el capítulo cerradito
El paso de Tano por el América también ha sido tema de conversación, dejando historias que emocionan y otros que desconciertan. Con su salida envuelta en rumores mediáticos como si de un culebrón se tratara, Ortiz quiso dejar las cosas claras: «Mis palabras hacia América siempre son de agradecimiento», dijo, aludiendo al respeto y la apreciación que tiene por el club que le dio la oportunidad de brillar como un diamante en la dirección técnica. Agregó que su salida fue en buenos términos, habiendo discutido todo de manera transparente con Santiago Baños.
El futuro del fútbol mexicano
El escenario está preparado, y es cuestión de tiempo antes de que las piezas se acomoden en el tablero del fútbol mexicano. Tano Ortiz, con su bagaje de experiencia y su deseo incansable de regresar a las andadas, se convierte en una opción tentadora para clubes en busca de inspiración y dirección. Los próximos días prometen ser intensos; los aficionados están a la expectativa, porque cuando el Tano pisa el banquillo, la acción comienza y las emociones están servidas.