¡Tremenda hazaña del Pachuca! Este miércoles, los Tuzos propinaron un rotundo 3-0 al poderoso Botafogo en el aclamado Derbi de las Américas de la Copa Intercontinental de la FIFA. Los hidalguenses supieron hacer vibrar a toda la afición con una exhibición de fútbol que dejó sin aliento al campeón brasileño.
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Un Primer Tiempo Reservado
En los primeros 45 minutos, ambos equipos pecaron de cautelosos, como dos titanes midiendo fuerzas antes de desatar la tormenta. El balón iba y venía, cual relámpago zigzagueante, pero las ocasiones de gol brillaron por su ausencia. El marcador seguía intacto al término de la primera mitad, con los aficionados anhelando el espectáculo que estaba por venir.
La Sorpresa Llegó en el Segundo Tiempo
Botafogo intentó entrar con todo en el segundo tiempo, pero Pachuca, liderado por el estratega Guillermo Almada, supo esperar su momento exacto para desplegar su mejor juego. Como un torbellino inesperado, Oussama Idrissi desató la locura al minuto 50. El marroquí, cual artista del balón, penetró la defensa rival por el ala izquierda, enfrentándose a dos guerreros brasileños para después lanzar un tiro imparable que dejó al arquero sin más que recoger el balón del fondo de las redes.
Dominio Tuzo en el Campo
A pesar de los esfuerzos del fogao por remontar, el destino ya estaba escrito. Al minuto 65, Nelson Deossa se plantó como un león en el área rival, rompiendo la defensa brasileña para con un certero remate establecer el 2-0. Era claro que Pachuca jugaba en su propio feudo, aun siendo en tierras neutrales.
El Broche de Oro de Rondón
No podía faltar la firma del «Rey» Salomón Rondón, quien selló la victoria al 80’. Idrissi, inspiradísimo, recibió en el área, alzó la mirada y como quien entrega un regalo perfecto, asistió al venezolano. Con un zurdazo demoledor, Rondón completó la goleada, dejando claro que los Tuzos pusieron la guinda al pastel en una noche mágica.
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El árbitro finalmente decreta el final del juego y los Tuzos son vitoreados, habiendo derrotado al campeón vigente de la Libertadores y del Brasileirao. Pachuca demuestra que no hay gigante que les intimide.
Esta noche, sin duda, será recordada como una noche en que el fútbol dejó ver su lado más emocionante y Pachuca selló su nombre con letras de oro en la historia del fútbol continental.
