En una reveladora entrevista con David Faitelson, Juan Carlos Osorio ha sacado a la luz la controversia detrás de su no contratación por parte de las Chivas. El técnico colombiano compartió su versión de los hechos, dejando claro que las opiniones en torno a su persona son más complejas de lo que muchos creen.
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La sorpresa que dejó a todos helados
De acuerdo con Faitelson, la directiva del Rebaño Sagrado, compuesta por figuras como Alejandro Manzo y Javier Mier, decidió no avanzar en las negociaciones para tener a Osorio como nuevo estratega del equipo. La razón presentada fue insólita: supuestos problemas de aliento alcohólico durante la reunión. Sin embargo, el propio Osorio ha desmentido esta acusación categóricamente, defendiendo su reputación y profesionalismo.
La trama se complica aún más al revelarse que, tras esta insólita decisión, un representante se acercó a las Chivas con la propuesta de Matías Almeyda, un técnico que siempre despierta añoranza en el corazón de la afición rojiblanca por los logros que cosechó en su anterior etapa. Momentos después de esa oferta, la llamada de Chivas a Osorio para comunicarle su negativa dejó a todos con la boca abierta.
Una salida envuelta en misterio
Osorio también abordó su reciente salida de Tijuana, donde aclaró que jamás tuvo dolores de cabeza relacionados con el consumo de alcohol o drogas, e incluso desmintió acusaciones sobre acoso laboral. Con firmeza, el estratega reafirmó su compromiso y ética profesional, asegurando que siempre se ha conducido con rectitud.
Antes de que los rumores se multipliquen, es urgente que tanto Tijuana como Chivas ofrezcan su versión oficial, más aún tras las contundentes afirmaciones del periodista Rubén Rodríguez, quien en semanas pasadas lanzó serias acusaciones sobre la situación del colombiano.
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En este mar de emociones y controversias, lo único claro es que la pasión por el fútbol nunca deja de arder, y la saga entre Osorio y Chivas es solo otra prueba de que en el balompié mexicano, el drama está siempre a la vuelta de la esquina. ¿Cómo se resolverá esta novela? ¡El tiempo lo dirá!
