La selección mexicana Sub-20, liderada por Eduardo Arce, enfrenta un desafío monumental en el Mundial de Chile 2025. Ubicados en el temido «Grupo de la Muerte», el Tricolor deberá medirse contra los gigantes Brasil y España, además de Marruecos, una de las potencias africanas en la categoría. Este camino, aunque lleno de obstáculos, es también una plataforma de oro para que la nueva generación mexicana brille en el escenario global.
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Brasil y España: Los colosos del Grupo C
El favoritismo de Brasil no es en vano. Con cinco títulos en su haber, aunque sin coronarse desde 2011, la «Canarinha» busca reconquistar la gloria con figuras resonantes como Endrick, la joya emergente del Real Madrid, y Vítor Roque, ex-Barcelona, junto a Gabriel Moscardo del Stade de Reims. Estos astros prometen ser un terror para cualquier defensa.
Por otro lado, España, apodada «La Furia Roja», no se queda atrás. Campeona en 1999, estará armada con talentos como Lamine Yamal del Barcelona y Marc Guiu, fichado por el Chelsea. Estos nombres convierten al grupo en una verdadera prueba de fuego para los sueños mexicanos.
México: Potencial y oportunidad
El Tricolor abrirá el torneo frente a Brasil, seguirá contra España y cerrará contra Marruecos. Llegan con el título de campeones del Premundial de Concacaf, tras vencer a Estados Unidos en una final épica. Nombres como Stephano Carrillo del Feyenoord y César Garza del Dundee FC forman el núcleo con experiencia europea, mientras que Yael Padilla de Chivas y compañeros locales completan el elenco talentoso.
Preparación en el Maurice Revello
Antes del Mundial, el equipo disputará el torneo Maurice Revello en Francia, del 4 al 6 de junio. Aquí enfrentará a Dinamarca, Japón y el Congo, una preparación ideal con estilos de juego diversos. Arce ha convocado a figuras adicionales como Hugo Camberos y Ángel Rico, buscando afinar cada jugada hasta alcanzar la perfección.
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La expectativa es alta y la presión palpable. La Sub-20 mexicana está lista para dejarlo todo en la cancha, y demostrar al mundo que tiene madera para grandes logros. En este Mundial, cada partido será una batalla digna de un cuento épico. ¡El balón está en juego y los sueños más grandes podrían hacerse realidad!
