América no solo arrolló a Mazatlán con una goleada inolvidable, sino que también se llevó consigo preocupaciones significativas dentro de su plantilla. En medio de un espectáculo futbolístico, Luis Ángel Malagón, portero titular y verdadero baluarte del equipo, sufrió una lesión tras un roce desafortunado con Sebastián Cáceres, lo que hizo sonar las alarmas en las Águilas ante la inminente recta final del torneo.
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Luis Malagón se convierte en una preocupación para América
A pesar de haber comenzado el partido con determinación, el guardameta se vio obligado a abandonar el terreno de juego al inicio de la segunda mitad, siendo reemplazado por Rodolfo Cota. Las imágenes de Malagón saliendo del estadio en un carrito de asistencias, incapaz de apoyar su pie, despertaron temores entre la fiel afición azulcrema.
El diagnóstico inicial ofreció una pizca de tranquilidad: se descartaron lesiones óseas y se determinó que se trataba de un problema muscular en su tobillo izquierdo. Desde el cuerpo médico del club, surgió una leve esperanza, al señalar que confían en una pronta recuperación y que su participación en la Liguilla aún no está del todo perdida.
Un golpe de realidad en la plantilla de Jardine
A través de las redes sociales, se dio a conocer que Luis Ángel Malagón será trasladado a un hospital para estudios más detallados. El arquero abandonó el campo al minuto 70 en un carrito, dándole paso a la ambulancia, en un momento que dejó a todos al borde del nerviosismo.
Pero el drama no termina ahí. André Jardine también se ve afectado por la pérdida de dos piezas fundamentales en su ataque: Brian Rodríguez y Diego Valdés. Ambos futbolistas sufren desgarros musculares, aunque se estima que la situación de Rodríguez es más complicada. Las noticias en torno a su recuperación son menos alentadoras que un gol en tiempo de descuento.
En contraste, Valdés podría regresar en el duelo de vuelta de los cuartos de final, e incluso estar disponible si las Águilas logran avanzar a las semifinales. Jardine atraviesa un calvario, esperando que la fortuna sonría al equipo en este momento crucial de la temporada.
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En medio del torbellino de lesiones, surge una luz al final del túnel. Alan Cervantes está a un paso de volver a las canchas, y el capitán Henry Martín, a pesar de lidiar con una tendinitis persistente, aún tiene un pequeño rayo de esperanza para participar en la Fiesta Grande. En Coapa se anhela que Martín evite el quirófano y esté listo para el desafío.
El estratega brasileño, cauto pero optimista, planea aprovechar este respiro entre partidos para recuperar a la mayor cantidad de jugadores posibles, sin perder de vista la situación de Malagón, que se ha convertido en un tema de conversación y preocupación en la capital. La afición espera ansiosa que su portero estrella regrese y que las Águilas vuelen alto en la lucha por el título.
