En un festín futbolístico digno del Azteca, la Selección Mexicana se alzó con la victoria ante el Internacional de Porto Alegre con un imponente 0-2. Este duelo amistoso, que sirve como preparación para la ansiada Copa Mundial de 2026, mostró un equipo tricolor comandado por Javier Aguirre, que dejó una estela de buen fútbol y emociones a flor de piel.
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Erik Lira inaugura el marcador
Transcurría el minuto 35 cuando una orquesta tricolor desafinó la defensa brasileña: Jesús Gallardo, con la precisión de un reloj suizo, lanzó un pase quirúrgico hacia el área. La magia continuó con Jorge Ruvalcaba, quien como un ilusionista, engañó a los zagueros rivales, dejando a Erik Lira frente al guardameta, quien no desaprovechó la oportunidad para anotar el primer gol del encuentro.
Jorge Ruvalcaba y el arte del gol
Poco antes de la pausa, Ruvalcaba nos regaló una genialidad de las que se graban en la memoria. Armado de velocidad y audacia, corrió como si el viento le empujara, dejando en el camino a una defensa sin respuesta y culminando con un gol de pura convicción. Con este tanto, México cerró el primer tiempo con una ventaja que prometía más alegrías.
México en modo imparable
Con el 0-2 en el marcador al silbatazo final, los comentaristas de TUDN coincidieron en que la actuación del equipo de Aguirre fue un deleite para los ojos. El rendimiento del Tri desbordó seguridad y potencia, aun cuando toda la hinchada empujaba en contra. En este espectáculo de fútbol, destacó el debut del joven prodigio Gilberto Mora, quien a sus apenas 16 años, tuvo un estreno prometedor en el fútbol de alto nivel.
La mirada puesta en River Plate
Con esta vibrante victoria en el bolsillo, México se prepara para el siguiente desafío en su calendario de amistosos: enfrentar nada menos que a River Plate en suelo argentino. Este será otro duelo que promete parar corazones, donde ambos equipos entrarán al campo a dejar el alma por llevarse el triunfo. Las emociones están servidas y seguro nadie querrá perderse este próximo capítulo.
