El futuro del fútbol mexicano resuena con fuerza en el nombre de José Humberto Mancilla López. Este joven delantero, una auténtica joya forjada en las entrañas de la cantera de Pumas, ha dejado de ser una promesa para convertirse en una realidad fulgurante tanto en los felinos como en la Selección Mexicana Sub-17. Su trayectoria es la de un talento que crece como un arroyo en temporada de lluvias.

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Ascenso Imparable: De los Campos Universitarios a la Escena Internacional
Desde su descubrimiento en un torneo en Mazatlán, Mancilla se ha destacado como un jugador con un olfato goleador innato. Su impacto no solo se siente en las categorías inferiores, sino que también ha escrito su nombre con letras de oro al llevar a los Pumas al título en el Torneo Clausura 2025 Sub-17. Recordamos su golazo en el mítico Estadio Olímpico Universitario, un canto a su habilidad que no podemos olvidar.
- Forja Universitaria: Desde muy joven, Mancilla fue captado por los visores de Pumas, sumándose a su Casa Club. Ha escalado con maestría en cada peldaño de la cantera, mostrando siempre ese hambre de llegar al primer equipo.
El Sueño Internacional: Mancilla y el Tri Sub-17
Mancilla no solo brilla en Pumas. Su talento ha cruzado fronteras, convirtiéndolo en un elemento inamovible de la Selección Mexicana Sub-17. Ha recorrido el mundo con giras en Europa y Sudamérica, enfrentándose a gigantes juveniles como Brasil, experiencias que lo han templado como el acero.
- En la Puerta del Mundial Sub-17: Su nombre ya suena fuerte para el Mundial Sub-17 de 2025, donde sus habilidades podrían catapultarlo al estrellato global. Este torneo se perfila como su trampolín hacia la historia.
Humberto Mancilla es más que una promesa; es un vendaval de talento que ilumina el horizonte del fútbol mexicano. Con su juventud y experiencia, se convierte en el azote de las porterías rivales, consolidándose como la «joya de la corona» de Pumas y un valuarte para el futuro del Tri.
