La tormenta mediática azota a Fernando Gago y su familia justo después de su repentino regreso a Argentina para tomar las riendas de Boca Juniors. Como si de una novela futbolera se tratara, el entrenador argentino y su esposa, Verónica Laffitte, están en el ojo del huracán tras ser acusados de dejar su hogar alquilado en Guadalajara en un estado deplorable. En una jugada digna de un gol de último minuto, Laffitte ha salido a defender con uñas y dientes a su familia ante lo que define como una acusación sin pies ni cabeza.
Verónica Laffitte defiende el honor de su familia
Siguiendo la ruta de un contragolpe bien orquestado, la esposa de Gago ha roto el silencio. Según ella, las acusaciones de la dueña del inmueble en Guadalajara no tienen fundamento alguno. «Es un espectáculo montado, una película de ficción», expresó Verónica, notablemente afectada, como si defendiera la meta de su equipo en penales decisivos.
La réplica de Laffitte: Incredulidad y determinación
Con la seguridad de quien pide el VAR en un instante clave, Verónica se mostró incrédula ante la necesidad de aclarar lo que considera una situación absurda: «Es increíble tener que perder tiempo en esta situación, ¡como si fuera una telenovela mal escrita!» Y mientras el público futbolero se acomoda en sus asientos, pendiente de cada palabra, Laffitte recalca que la verdad está de su lado, ofreciendo su versión y la de su familia como testigos.
Fernando Gago y su esposa planean acciones legales
En un giro inesperado, Gago y Laffitte están preparando una contraofensiva en los tribunales. En una jugada que recuerda a la estrategia de un director técnico en la recta final de un torneo, han decidido emprender acciones legales contra la arrendataria. «Es una mentira total, y ya estamos moviéndonos como un delantero en el área chica», subrayó Verónica, mostrando que están decididos a llegar hasta las últimas consecuencias. La expectación crece, y los fanáticos del fútbol y del drama no pueden esperar para ver cómo acaba esta saga internacional.