Pumas enfrenta un momento decisivo en su historia de cara al Clausura 2025. Bajo la dirección de Efraín Juárez, el equipo universitario se prepara para una reestructuración total. A pesar de los deseos del técnico, uno de los jugadores que no entra en sus planes, Rogelio Funes Mori, seguirá en el club debido a circunstancias contractuales que han generado un verdadero hervidero entre la afición de Ciudad Universitaria.
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Santos Laguna mira al futuro con cambios estratégicos
Funes Mori, tras su paso por el club, ha acumulado 36 partidos y apenas tres goles, un registro que sin duda es como una pesadilla para un delantero de su calibre. El jugador, conocido por sus habilidades de gol, se ha visto desprovisto del toque mágico que se espera de él. En contraste con el entusiasmo de su llegada, el tiempo ha sido implacable.
Decisiones difíciles en el horizonte felino
El contrato de Funes Mori con Pumas se extiende hasta diciembre de 2025, y con un salario de 1.5 millones de dólares anuales, se ha convertido en un desafío monumental para la directiva universitaria. El altísimo sueldo es como un ancla que complica su salida a otro equipo, una tarea que parece más cuesta arriba que escalar el Popocatépetl.
La decisión de Efraín Juárez es clara: busca liberar espacio y presupuesto para traer nuevos talentos al plantel. No obstante, Funes Mori sigue en el equipo, como un elefante en la habitación que todos saben está ahí, pero que nadie sabe cómo manejar.
Por delante: un mercado de fichajes intrigante para Pumas
En este contexto, aunque el delantero argentino no ocupa una plaza de NFM, Pumas puede seguir buscando otros refuerzos en la delantera. La afición observa con expectativa este periodo de cambios, como quien espera la tormenta que precede al arcoíris, ansiosa por ver qué sorpresas depara el futuro del equipo.
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La pasión del fútbol nunca se detiene, y en Ciudad Universitaria, la historia continúa escribiéndose con cada decisión, cada gol, y cada acción en el campo.
