En un movimiento que promete prender fuego a la escena futbolística del continente, el Club Atlético Grau de Perú ha decidido no quedarse de brazos cruzados para el 2025. Este histórico club, con 105 años de antigüedad, ha sumado a su plantilla a dos figuras amadas por la afición del extinto Monarcas Morelia, y todo con miras a conquistar la Copa Sudamericana 2025.

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El Regreso del ‘Cazador Inagotable’
Raúl Ruidíaz, el artillero peruano de 34 años, está de vuelta en tierras sudamericanas después de su periplo por la Major League Soccer. En la Liga MX, Ruidíaz fue una auténtica maquinita de goles con Monarcas Morelia, anotando 41 dianas en 73 apariciones, y llevándose el título de máximo anotador en dos torneos consecutivos, Apertura 2016 y Clausura 2017. Su transferencia millonaria a los Seattle Sounders en 2018, por 7.1 millones de dólares, marcó un récord para el club mexicano, pero ahora el delantero está listo para encabezar el ataque de Atlético Grau con la misma letalidad de un jaguar en la selva.
Bajo el Saque de un León
El banquillo del Atlético Grau también tiene un nuevo comandante, alguien que conoce bien los entramados del fútbol mexicano: Ángel David Comizzo. Este ex-portero argentino tuvo un paso notable por el Monarcas, entregando su vida bajo el travesaño en 69 partidos y siendo parte del equipo que levantó el primer y único título del club en el Invierno 2000. Si algún técnico puede insuflar garra a Grau, es Comizzo, un hombre que ha vivido todo entre los tres postes y no teme a las turbulencias, como aquel famoso incidente que lo catapultó a la fama por su icónica patada voladora.
Un Sueño que se Transforma en Realidad
Atlético Grau terminó en la séptima posición de la emocionante Liga 1 de Perú en 2024, asegurándose un boleto a la soñada Copa Sudamericana 2025. Ahora, con Ruidíaz listo para rematar como un torbellino en el área y Comizzo llevando las riendas con la experiencia de un viejo lobo del mar, el club peruano ha dado un paso de gigante en su búsqueda por la gloria continental. Como un equipo que redescubre el hambre de triunfo, el objetivo es claro: levantar la Copa y poner su nombre en la historia del fútbol sudamericano con letras doradas.
La emoción está al máximo, y los aficionados están más que listos para vivir un torneo que promete llevar a todos a la orilla de sus asientos con cada pitido del árbitro. Atlético Grau está preparando su artillería, y no hay duda de que darán la batalla hasta el último minuto del partido. ¡Aquí viene una temporada que promete goles, emociones y posiblemente una nueva era dorada para el club!

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