Santi Cazorla, una voz autorizada cuando se trata de la trayectoria de Xavi Hernández, ha compartido en una reciente entrevista sus sentimientos sobre la etapa de su amigo como máximo dirigente del banquillo del FC Barcelona. A través de este íntimo relato, Cazorla nos traslada al corazón mismo de la metamorfosis blaugrana con un tono apasionado y nostálgico.
Duplica tu depósito hasta $200.000 en apuestas y casinos bono de bienvenida
La apuesta valiente de Xavi
Con el entusiasmo de quien coloca el balón justo en la escuadra, Cazorla afirma con rotundidad que Xavi ha sido clave en el renacimiento del Barça. Como un capitán que navega en mares tempestuosos, la llegada de Xavi marcó un antes y un después, apostando con audacia por la cantera, corazón latente del Camp Nou. «Asumió el cargo en un momento delicado por el amor al club y sus ganas de ayudar», destaca Cazorla, recordando que figuras emergentes como Pau Cubarsí o Lamine Yamal se transformaron en talentos de talla mundial bajo la tutela de Xavi. «Hizo que el Barça volviera a competir por los títulos», añade con emoción, subrayando que, lamentablemente, su amigo no recibió el reconocimiento que merecía.
Una etapa difícil
Durante su aventura conjunta en Qatar, Cazorla presenció de cerca las pruebas y tribulaciones de Xavi. Con el mismo espíritu combativo con el que encara los partidos, Cazorla no titubea al señalar que el entrenador vivió momentos de auténtico calvario. «Se fue muy injusto con él, ha sufrido mucho», comenta con la sinceridad de quien ha compartido vestuario y amistad. La presión, como un fiero rival en el campo, no fue benigna con Xavi.
El futuro de Xavi
Pese a estos altibajos, Cazorla, con el tono sereno de quien ve el futuro con optimismo, nos ofrece una visión esperanzadora. «Ahora lo que quiere es descansar y pasar tiempo con su familia», revela, dejándonos con la certeza de que el futuro de Xavi Hernández en los banquillos no ha escrito su última página. Como un buen vino que mejora con el tiempo, el regreso de Xavi al mundo del fútbol parece solo cuestión de tiempo.
