Quería Míchel presenciar la cúspide de su equipo para cerrar un 2024 memorable, y sus pupilos respondieron con una actuación deslumbrante ante el Valladolid. Tras el partido, el técnico vallecano se mostró visiblemente satisfecho con la actitud y desempeño del equipo ‘gironí’, que aplastó al rival como un torbellino imparable.
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Un final de año brillante
«Terminar el año de esta manera era crucial. Creo que el equipo ha hecho un esfuerzo titánico en la presión tras pérdida. Ha sido de los mejores partidos en este aspecto. No permitimos transiciones rápidas. Estoy encantado con este 2024, que ha sido un regalo para nosotros. Esta victoria nos ofrece calma y confío en que este equipo puede aspirar a metas más altas», expresó Míchel con convicción.
«Apuntamos a las estrellas: un puesto entre los siete primeros»
Sin lugar a dudas, el 2024 quedará grabado en la memoria de los seguidores del Girona, pero el 2025 promete ser aún más emocionante. «¿Qué espero del nuevo año? Salud para trabajar y tener la capacidad de dar lo mejor de nosotros y luchar por nuestros sueños. Y mi anhelo es situarnos entre los siete primeros de esta temporada. Tengo ganas, ilusión y motivación para conseguirlo, y eso es lo que quiero transmitir a mis jugadores. Contamos con una plantilla excelente para lograrlo. Deseo mantener esa continuidad», reflexionó el estratega.
El resurgir de Danjuma y Abel
Sobre el desempeño de Danjuma, debutante en Liga, y Abel, quien volvió a anotar, el técnico del Girona indicó que «los delanteros viven del gol, aunque realizan un trabajo magnífico en otros aspectos del juego. Había críticas sobre nuestra escasa puntería, pero hoy disparamos a puerta más de veinte veces. Trabajamos para ser más directos y hoy lo comprobamos. Los goles de Danjuma y Abel sin duda fortalecerán su confianza».
