Thiago Motta, después de cautivar a la Serie A con una campaña histórica al mando del Bolonia, obteniendo un ansiado billete para la Champions League tras 60 largos años de espera, emprendió un nuevo capítulo en su carrera al fichar por todo un gigante del Calcio: la Juventus. Con su estilo de juego vibrante, basado en la construcción desde la retaguardia y un enfoque constante hacia la portería rival, llegó a Turín como un mago que buscaba transformar el Allianz Stadium. Sin embargo, a medio año de su llegada, podría encontrarse en la cuerda floja.
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Un Futuro Glorioso en Juego
El técnico italiano, a sus 42 años, firmó un contrato hasta el 30 de junio de 2027. Su intención era erigir un proyecto ganador, devolviendo a la Juventus a la cima del fútbol italiano y convirtiendo a la Vecchia Signora en un coloso temido en toda Europa. La dirección de Turín respaldó esta ambición con una inversión significativa en el mercado de verano, incorporando a jugadores clave como Teun Koopmeiners por 54,7 millones de euros, Douglas Luiz por 51,5 millones, y el prometedor Khéphren Thuram por 20,6 millones, cimentando así un proyecto a medio plazo.
Obstáculos en el Camino
A pesar de las altas expectativas, los resultados no han llegado como se esperaba. Ocupando el quinto puesto en la Serie A con 52 puntos tras 29 jornadas, la Juventus ha tropezado con nada menos que 13 empates, como una melodía desafinada en una ópera que prometía ser gloriosa. En Europa, su sueño de Champions terminó prematuramente ante el PSV Eindhoven en el playoff previo a octavos, y en la Copa Italia, fue sorprendida por el Empoli en los cuartos de final.
Una Última Oportunidad
En Italia, se respira una atmósfera de expectativa y nerviosismo. Aunque la Juventus parece darle a Motta al menos un encuentro más para probar su valía, el próximo partido tras el parón de selecciones contra el Genoa podría ser su última carta. Mientras tanto, en los bastidores de Turín, se barajan nombres para un eventual reemplazo. Tanto Roberto Mancini, el exseleccionador italiano, como Igor Tudor flotan como nubes sobre el horizonte de la Juventus.
Posibles Sustituciones
Se murmura que Igor Tudor, de 46 años, es el candidato favorito para tomar las riendas. Tras un breve paso por la Lazio, el croata parece estar en sintonía con el club para un posible contrato de un año, con opción a otro más si logra llevar a la Juventus a la Champions League. El desenlace sobre el futuro de Thiago Motta está por escribirse, y la Juventus, como un fénix, busca renacer de sus cenizas rumbo a la gloria perdida.
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