Hugo Ekitike encendió la chispa del Eintracht Frankfurt con un gol poco después del cuarto de hora en un partido lleno de emoción y oportunidades. Fue una noche mágica de fútbol que añadió sal a las heridas del Borussia Dortmund, intensificando la angustia de su entrenador, Nuri Sahin, y catapultando al Eintracht al codiciado tercer lugar de la Bundesliga. No solo Ekitike brilló, sino que el danés Oscar Hojlund selló la victoria con un gol en tiempo añadido, como un músico rematando con una nota perfecta una sinfonía de emoción.
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Contrastes en la Bundesliga
Mientras el Borussia Dortmund se sumerge en una crisis cada vez más profunda, el conjunto dirigido por Dino Toppmoller está viviendo su cuento de hadas en este 2025 con una racha de victorias que son como música para sus hinchas. Dejando atrás los nubarrones de finales del 2024, donde tropezaron en cinco partidos sin conseguir un solo triunfo, el Eintracht ahora galopa con confianza tras victorias ante St. Pauli y Friburgo, y este sábado, derribaron a un gigante como el Borussia Dortmund.
Oscura noche para el Dortmund
Las sombras no se despejan sobre el equipo de Nuri Sahin, que podría estar viviendo sus últimos días al frente del banquillo del Dortmund. Con esta, su tercera derrota consecutiva, se aleja peligrosamente de la zona europea. Han ganado solo uno de sus últimos ocho encuentros, un balance que hace temblar a la fiel afición amarilla.
Matices en cada jugada
Con el próximo reto de visitar al Bolonia en la Liga de Campeones, el panorama del Borussia es tan complicado como cruzar un río caudaloso en el décimo puesto de la tabla, a once puntos del Eintracht y a nada menos que diecisiete del líder, el Bayern Múnich. Desde el pitido inicial, Hugo Larsson lanzó el primer aviso que el guardameta Gregor Kobel detuvo con maestría, aunque la madera se alió para salvar a los locales ante un gran remate del cabezazo de Serhou Guirassy.
El gol de Ekitike fue casi un destello, fulminante como un relámpago, nacido de un contragolpe impecable junto a Rasmus Kristensen, concluyendo en un toque sutil que rompió el empate inicial. Los visitantes pudieron haber ampliado su ventaja con un misil desde la frontal de Ansgar Knauff que acabó besando el poste.
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Reacción tardía y sentencia final
La segunda mitad mostró a un Borussia más dinámico, con la entrada de Yan Couto aportando una chispa que revivió momentáneamente a los suyos, con una jugada de peligro que el pie de Kevin Trapp desbarató. De ahí en adelante, el partido se tornó una montaña rusa, una batalla de ida y vuelta que mantenía a los tifosi al borde del asiento. Pero fue Oscar Hojlund quien cerró el telón con una estocada final, tras robar un balón en el corazón del campo y fusilar con un tiro preciso, pulverizando las esperanzas del Dortmund.
