Después de la dolorosa derrota en el partido de ida de las semifinales de la Europa League, el Athletic Club de Bilbao enfrenta un emocionante y desafiante derbi contra la Real Sociedad. Este encuentro no solo promete ser de alta tensión como cualquier buen derbi, sino que también es crucial en la clasificación.
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Un Golpe Duro: Nico Williams Fuera de Juego
El panorama se oscurece aún más para el equipo de Ernesto Valverde, que no solo lleva la carga de la caída ante el Manchester United, sino que también debe prescindir de su estrella, Nico Williams. El joven talento se ve obligado a quedarse fuera debido a persistentes problemas de pubis que han mermado su rendimiento en las últimas semanas.
Confirmación en la Rueda de Prensa
Valverde, siempre sincero y directo, confirmó en la rueda de prensa previa al derbi que Nico «no está bien» debido a las molestias y que «acabó muy mal» tras el enfrentamiento con los ‘red devils’. Este alivio fue solo un espejismo en medio del desierto para los aficionados de ‘Los Leones’.
El Reto de la Temporada
«Está haciendo un esfuerzo por estar, pero no está bien,» señaló Valverde, enfatizando que la exigente temporada cobra factura a cada jugador. Como las olas que erosionan la roca, los partidos intensos traen problemas inevitables, y el técnico está al tanto de ello: «Veo a otros equipos con lesionados y nosotros no estamos exentos.»
Con Nico fuera del derbi vasco y posiblemente ausente en el decisivo partido de vuelta en la Europa League, el Athletic enfrenta un desafío titánico: el milagro en Old Trafford.
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Otros Dolorosos Dilemas
El derbi podría complicarse aún más, ya que Óscar de Marcos, quien fue sustituido durante el descanso en el partido contra el United, está en duda, y aunque Oihan Sancet «va bien» en su recuperación, su participación en la Europa League sigue siendo incierta.
El Athletic se encuentra al borde de un precipicio, con la mirada fija en el horizonte y el corazón en un puño mientras se prepara para este crucial derbi. Cada jugada y decisión se tornarán vitales, como pasos en una cuerda floja que puede llevarles a la gloria o al abismo. ¡Que ruede el balón!
