En medio de la disputa entre David Broncano y Pablo Motos por alzarse con el trono del prime time televisivo en España, Lamine Yamal ha deslumbrado como invitado estrella de El Hormiguero. El joven jugador del Barça, una de las joyas más brillantes del fútbol español y mundial, escogió el programa de Antena 3 para revelar una noticias que ha dejado a todos boquiabiertos: anunció su rol en la Kings League, la ambiciosa liga impulsada por Gerard Piqué.
Lamine Yamal: El Futuro del Barça y la Kings League
Lamine comenzó hablando de su conexión con Nico Williams, uno de los nombres más destacados del verano en Barcelona. "Compartimos gustos, bailes y música," comentó. Aunque el futuro es incierto, Lamine no ocultó su ilusión: "Ojalá poder jugar cada semana con él."
El Bombazo: ¡Tendrá su propio equipo en la Kings League!
El momento clímax llegó cuando Yamal reveló su papel en la Kings League: "Tendré mi propio equipo," anunció con un brillo en los ojos. El joven prodigio será uno de los presidentes de la liga, contando con su propio entrenador y jugadores. Pablo Motos no perdió la oportunidad de preguntarle sobre las responsabilidades, a lo que Lamine respondió jocoso: "Me gusta, hay que meterle caña", riendo con el entusiasmo característico de un crack.
Desde la Eurocopa hasta los Videojuegos
Lamine recordó cómo se preparaba para los exámenes de la ESO mientras sus colegas Pedri, Dani Olmo y Nico Williams se entretenían con la PlayStation. "Desde la Euro todo el mundo es más feliz, veo a la gente más sonriente. Es un sueño," destacó, mostrando cuánto ha influido su éxito en el ambiente.
El jugador del Barça también mostró su lado cómico al hablar de los videojuegos, mencionando su puntuación en el famoso FC 25: "Me han dado una puntuación más mala…81". Añadió entre risas que se subiría algunos puntos en ritmo y regate, aunque en defensa no tanto porque "no defiende nada."
La Influencia y Picardía del Fútbol Callejero
Y para cerrar con broche de oro, Lamine compartió un entrañable recuerdo de su infancia en Rocafonda: "Cuando mi padre me venía a buscar al cole traía un balón y yo iba jugando por la acera con mis dos perros. Nos tirábamos al suelo, me mordían y todo". Esos momentos callejeros, dijo, han complementado la picardía en su juego.
"Espero ser una leyenda del Barça", concluyó Yamal, dejando claro que su ambición no tiene límites. Con su talento desbordante y carisma, no cabe duda de que está en camino de alcanzar esa meta.