Simone Inzaghi dejó un mensaje claro con su alineación en el partido de Serie A contra el Hellas Verona, anticipando el crucial enfrentamiento de semifinales de la Champions League ante el Barça, que se jugará el martes 6 de mayo en el Giuseppe Meazza. A pesar de estar detrás del Nápoles en la liga, el técnico italiano decidió dar descanso a diez de los titulares de Montjuïc; solo Yann Bisseck, sustituto de Benjamin Pavard en el sector derecho de la defensa, repitió en el once.
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Revelaciones tras el empate en Montjuïc
Después de un vibrante 3-3 en el Estadi Olímpic, se despejaron varias incógnitas. Una de ellas: Marcus Thuram está más que listo. El delantero del Inter, e hijo del exazulgrana Lilian, se recuperó con rapidez tras su lesión en cuartos de Champions contra el Bayern. Suficiente tuvo con un destello de magia para marcar un golazo de tacón a pase de Dumfries, como si lanzara una flecha al corazón del rival.
La encrucijada de Inzaghi sin Lautaro
Inzaghi presentó su plan B para cubrir la ausencia de Pavard, aunque todo indica que Pavard podría regresar para el crucial partido. Sin embargo, cuando parecía que el rompecabezas estaba armado, surge un imprevisto: Lautaro Martínez salió lesionado al descanso. Considerado el líder y máximo goleador del equipo, el argentino fue diagnosticado con una distensión en los flexores del muslo izquierdo, según confirmó el comunicado oficial del Inter. Mientras que algunos en Italia sueñan con un «milagro» que permita verle en el campo, Inzaghi ya busca alternativas para no perder su chispa en la delantera.
Duelo de titanes en el ataque
Contra el Hellas Verona, Marko Arnautovic y Joaquín Correa lideraron la línea ofensiva. Sin embargo, parece que para acompañar a Marcus Thuram, Inzaghi solo podría contar con el experimentado Arnautovic, ya que Correa no está inscrito en la Champions.
Arnautovic es un veterano en el campo, un ‘9’ muy experimentado, poderoso y dominante en el juego aéreo, acumulando siete goles y dos asistencias en 888 minutos esta temporada. Aun siendo un suplente cumplidor, su rol sería más desagradecido al tener que batallar con los centrales del Barça y descargar balones.
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Por otro lado, Mehdi Taremi emerge como otra posibilidad. El iraní, que llegó como agente libre procedente del Oporto, es un delantero con características similares a Arnautovic y destinado a aportar eficiencia en el juego aéreo con tres goles y seis asistencias en 1.621 minutos. Su participación liberaría a Thuram de tareas más físicas, permitiéndole enfocarse en lo que mejor hace: crear magia y desequilibrar defensas.
La decisión final, un secreto guardado bajo llave por Inzaghi, promete mantener en vilo a todos hasta el martes. Pero una cosa es segura: el Giuseppe Meazza estará absolutamente encendido, empujando a su equipo en una noche que promete ser antológica en el teatro de los sueños del fútbol europeo.
