En un encuentro que se compara con un choque de titanes en el mundo del deporte y la política, Gianni Infantino, presidente de la FIFA, se reunió con Donald Trump en el emblemático Despacho Oval de Washington. El motivo principal fue la presentación del próximo Mundial de Clubes, el cual se llevará a cabo en suelo estadounidense el próximo verano. Sin embargo, este no fue el único tema sobre la mesa, pues también discutieron el tan esperado Mundial de 2026, que será compartido por Estados Unidos, Canadá y México.
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Mundial 2026: Preparativos y Expectativas
Durante su conversación, Infantino destacó el meteórico ascenso de la selección estadounidense bajo el liderazgo del argentino Mauricio Pochettino. «El equipo está en ascenso, con jugadores que brillan en Europa», señaló Infantino, comparando a los jugadores con una estrella que emerge en el cielo deportivo. Burlonamente, sugirió traerlos de vuelta a casa recordando la conocida estrategia de Trump para repatriar industrias.
En una nota más extravagante, Infantino reavivó el entusiasmo al mencionar el show que planean para la final del Mundial 2026, queriendo hacer sombra al famosísimo ‘halftime’ del Super Bowl. «Que sea 20 veces mejor y más grande», proclamó Infantino con un brillo en los ojos. Trump, tan bronceado como un jugador recién salido del campo, le dio la razón con una sonrisa cómplice.
¿Puede Estados Unidos Levantar la Copa? Una Pregunta con Puñaladas de Esperanza
En cuanto a las esperanzas estadounidenses, Trump no pudo resistir preguntar si Estados Unidos podría ganar el Mundial. Como un mago sacando un as de la manga, Infantino afirmó con confianza: «¡Puede ganar, con el apoyo del público! Los corazones de acero de los jugadores brindan posibilidades inesperadas».
Anticipando el Mundial de Clubes
El Mundial de Clubes también fue un tema candente. Infantino deslizó nombres de galácticos como «Real Madrid, Manchester City, Bayern de Múnich, París Saint-Germain», refiriéndose a ellos como «multinacionales» que siempre están en la palestra, demostrando que en el fútbol, como en la vida, el tamaño sí importa.
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Tensiones Políticas Como Combustible Deportivo
Por otro lado, Trump aprovechó el encuentro para anunciar la creación de un grupo de trabajo encargado de los preparativos para el Mundial de 2026. «Creo que lo hará más emocionante», afirmó Trump. Con esta afirmación, asomó la cabeza por la ventana del optimismo, sugiriendo que las tensiones entre las naciones anfitrionas son «algo bueno» que le dará un sabor picante al torneo, como si de un buen guiso se tratara.
Este paso marca el inicio de una serie de esfuerzos coordinados que prometen convertir el próximo Mundial en un evento inolvidable para América del Norte, una fiesta del fútbol que atraerá hordas de aficionados de todo el planeta. ¡Que empiece el espectáculo!
