El Manchester City se encuentra al borde de la eliminación tras su estrepitosa actuación en el Parque de los Príncipes. El equipo dirigido por Pep Guardiola fue claramente superado por un PSG arrollador que dominó de principio a fin, lo que deja al conjunto mancuniano sin opciones para los playoffs a falta de solo una jornada en la Champions League.
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Guardiola, Desarmado ante la Maquinaria Parisina
Durante el encuentro, el estratega de Santpedor se quedó sin respuestas, mientras el técnico Luis Enrique respiraba con alivio tras el pitido final. Tras el partido, Guardiola confesó la evidente superioridad del rival: «El mejor equipo ha ganado, han sido mejores. Conseguimos dos goles relámpago en minutos, pero ellos fueron igualmente eficaces. Con la atmósfera, con lo que estaba en juego… han merecido ganar«, admitió.
Un Encuentro con Falta de Propuesta
Señalando la carencia de posesión, Guardiola indicó que fue uno de los factores clave de la derrota: «Para ganar hay que jugar, y nosotros no lo hicimos. Defender el resultado exige tener el balón, llevar el compás del partido, y nosotros carecimos de eso. Ellos tenían la posesión, atacaban con más precisión, lo que complicó todo«, explicó el técnico. «El partido nunca fue como lo planeamos, pero el mérito es del PSG. Son un equipo formidable y, por eso, hay que entender la derrota», añadió.
Una Última Oportunidad en Casa
A pesar del duro revés en París, el City tiene su destino en sus propias manos: «Afortunadamente, dependemos de nosotros mismos en casa. Ganando, avanzaremos, pero debemos mejorar; si no ganamos, será porque no lo merecemos». Ante las preguntas sobre la posibilidad de quedarse fuera de los playoffs, Guardiola fue franco: «Puede suceder. El PSG es un hueso duro, la Juventus también lo es, y todos los partidos de visitante son complicados. Así es el fútbol. No hemos sumado los puntos necesarios, y debemos aceptarlo. El último partido contra el Brujas será decisivo«, concluyó el técnico con una mezcla de realismo y esperanza.