Nunca subestimes al gigante parisino, incluso después de conquistar su primera ‘Orejona’. En el imponente París, donde los escritorios no conocen el descanso, la prioridad principal ha sido encontrar un defensor central que dé respiro a la formidable dupla formada por Marquinhos y Willian Pacho. El favorito es Ilya Zabarnyi, un baluarte del Bournemouth, conocido por su proyección, su dominio aéreo y su habilidad para iniciar el juego desde atrás como un maestro ilusionista.
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Presiones en el Ataque
En el mediocampo parisino, todo parece intacto. Con jugadores como Vitinha, Joao Neves, y Fabián, no parecía necesario hacer cambios en la delantera. Sin embargo, el regreso de cedidos como Kolo Muani y Marco Asensio, junto a otros como Gonçalo Ramos, complica el panorama. Es un rompecabezas con un tridente de ataque ya definido que se resiste a aceptar más piezas.
Ajustes en la Plantilla
¿Podrían estar los parisinos tramando un golpe maestro? La misión del PSG es clara: reducir su plantilla y dejar ir a aquellos que no encajan en el plan de Luis Enrique. Uno de los señalados es Randal Kolo Muani, a quien presionan para dar el salto. Con clubes como Milan, United, Newcastle, e incluso la Juventus ‒donde ya brilló previamente‒ mostrando interés, el futuro del jugador está más caliente que un sol de agosto.
El Valor de Muani
Pensando ya en el Mundial 2026, el campeón de Europa no lo soltará por menos de 50 millones de euros. Una cifra que no asusta a los equipos de la Premier, siempre hambrientos de talento.
Incertidumbres con Gonçalo Ramos
Gonçalo Ramos también podría estar haciendo las maletas si surge una oferta adecuada. Aunque su estilo de juego, un tanto distinto al resto, ofrece un valioso recurso en las jugadas aéreas, lo que podría frenar su salida del club.
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Isak en el Radar
Si el PSG logra soltar lastre, podría abrirse la puerta a un fichaje de renombre. Alexander Isak, la estrella del Newcastle, se ha convertido en el centro de atención. El sueco ha expresado su deseo de un cambio de aires, pero los ‘urracas’ no lo dejarán partir por menos de 172 millones de euros, una cifra que incluye generosas comisiones para los agentes.
Con estos movimientos, el PSG se prepara para encarar el desafío financiero con la UEFA y volver a la carga del mercado como un titán indomable, siempre listo para sorprender al mundo del fútbol. El drama está servido en la capital francesa.
