El fútbol europeo y el beticismo en particular recibieron un soplo de aire fresco a principios de semana con la emocionante noticia de la incorporación del joven talento catalán Félix Garreta al Real Betis Deportivo. Bajo la dirección del icónico Arzu, el equipo busca superar el bache actual en la Primera RFEF para volver a pelear por una posición en los codiciados ‘play-off’ de ascenso a LaLiga HyperMotion.
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Un viaje lleno de promesas
Nacido en el municipio de Palau-solità i Plegamans hace tan solo 20 años, Félix se unió a las filas de la cantera verdiblanca en 2020, después de su paso por la Damm. En poco tiempo, dejó su marca en el club al ser fundamental en la consecución del título liguero del Juvenil. Su talento no pasó desapercibido y fue incluido en la pretemporada del primer equipo en el curso 2022-23 bajo la batuta de Manuel Pellegrini.
Debut soñado
El 29 de diciembre, Félix Garreta tuvo un debut de ensueño con el primer equipo del Betis frente al Athletic, jugando los 90 minutos con un nivel sobresaliente. A pesar de su destacada actuación y ser uno de los pilares del filial, el club decidió cederlo al Amorebieta para la temporada 2023-24, un movimiento estratégico que prometía darle alas al joven defensa.
Tragedia y Resurgir
Con el Amorebieta, Félix se lució, participando en 33 partidos y anotando cuatro goles en LaLiga HyperMotion. Sin embargo, una tragedia golpeó inesperadamente el 9 de mayo, cuando sufrió un traumatismo craneoencefálico debido a un accidente doméstico, que lo dejó en coma en un hospital de Barcelona.
El comunicado de la SD Amorebieta arrojaba una sombra de preocupación: «Félix Martí Garreta sufrió recientemente un traumatismo craneoencefálico por una caída doméstica. El pronóstico es reservado y está pendiente de evolución».
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El camino hacia la recuperación
La lucha del joven defensa catalán fue titánica. Despertando cinco días después, un soplo de esperanza inundó a sus seres queridos. Desde entonces, ha dado pasos de gigante, como anunció el club bético a finales de octubre: «Félix ha superado la primera fase de su recuperación. Ha completado la rehabilitación neurológica y ha recibido el alta médica».
Finalmente, el pasado lunes, Félix recibió el alta deportiva e ingresó nuevamente en la plantilla del Betis Deportivo. Su regreso será progresivo, y con casco protector, como un caballero armado dispuesto a enfrentar de nuevo la batalla en el campo, su segunda casa. El joven zaguero no solo representa el espíritu indomable del fútbol, sino también la resiliencia y la pasión por volver a brillar.