En una noche que quedó grabada en la memoria de los seguidores del Real Madrid como un thriller con final amargo, el Athletic se impuso por 2-0, y el foco se posó en Kylian Mbappé. El delantero francés, quien cargaba con las esperanzas de su equipo, falló un penalti crucial cuando aún había tiempo para buscar la remontada, dejando en la afición una sensación de frustración palpable. Sin embargo, Mbappé no fue el único protagonista en el baluarte blanco que tropezó en el ardor de San Mamés.

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Errores que cambian el rumbo del partido
La otra cara de la moneda fue Fede Valverde, quien tomó un triste papel en un momento clave del encuentro. Con el Madrid recién celebrando un gol de Bellingham que devolvía el aliento, el uruguayo se convirtió en presa del desatino. En una jugada arriesgada, intentó un arriesgado caño cerca de la frontal de su área, como quien juega con fuego sin temer quemarse. El balón terminó en los pies del Athletic, y Guruzeta no dudó en convertir la oportunidad en el segundo tanto para los locales. Este fue el «golpe de gracia» que selló la derrota del Madrid, una daga que tocó fibras sensibles en el equipo merengue.
La reacción de Valverde: cara a cara con sus errores
A pesar de la tristeza y decepción que reinaban en el vestuario, según Carlo Ancelotti, Fede Valverde no rehuyó su responsabilidad. El centrocampista recurrió a las redes sociales para manifestarse, trazando un puente de comunicación directa con la afición madridista. Con la honestidad como bandera, escribió en su Instagram personal: «Hoy ha sido un golpe duro, pero asumo toda la culpa, doy la cara y pido disculpas.» Sus palabras resonaron como un eco de humildad entre sus compañeros y seguidores, como un faro de esperanza en una tormenta futbolística.
Valverde agregó: «Por mis compañeros y la afición. Sé que es fútbol y son cosas que pueden suceder, pero no son ajenas a mí y no quería dejar de expresarme por el error que cometí. Todavía queda mucho camino, muchas competiciones y estoy seguro que muchas alegrías. Gracias y Hala Madrid». Su mensaje era un canto a la resiliencia y al camino aún por recorrer.
El apoyo inquebrantable de Vinicius Jr
Y en el intercambio virtual de emociones, no se hizo esperar la respuesta de Vinicius Jr., quien, como un fiel compañero, no dudó en tender una mano amiga desde sus redes. Con un simple pero profundo «Te queremos», mostró que el espíritu de equipo prevalece incluso en las noches más sombrías. Como dice el refrán, «no hay mal que por bien no venga», y el Madrid deberá levantarse para escribir nuevas páginas de gloria en su historia.

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