Marc-André ter Stegen casi cambia de aires en 2016
«De hecho consideramos cambiar de club», admitió el arquero del FC Barcelona, Marc-André ter Stegen, a Bild, recordando cómo las convicciones de Pep Guardiola lo llevaron al umbral del Manchester City en el verano de 2016. Este fue el primer año de Guardiola al mando del City, un periodo en el que el entrenador español convenció a Ter Stegen de sus ambiciosos planes.
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Originario de Alemania, Ter Stegen, quien había hecho un nombre en el Borussia Monchengladbach durante tres temporadas, dio el salto a la Ciudad Condal en 2014, apenas con 22 años. Sin embargo, la llegada de Claudio Bravo del Real Sociedad en ese mismo periodo significó que ambos arqueros tendrían que compartir el tiempo de juego, una situación que resultó ser frustrante para el joven arquero.
Reuniones decisivas en Barcelona
Recordando aquellos días, Ter Stegen confidenció que efectivamente tuvieron una reunión crucial en Barcelona, donde Guardiola voló para reunirse con él en casa de un amigo. Allí, el técnico expuso sus ideas y le aseguró que lo quería en el City, expresando su deseo de contar con el portero talentoso en su nuevo proyecto.
Durante la conversación, Ter Stegen no pudo evitar sentir que esta podría ser la “solución perfecta” a sus inquietudes. Se le proponía un plan atractivo, que terminaba por resultar un atractivo proyecto, uno que resultaría ser un éxito rotundo en los anos siguientes. “Viéndolo todo ahora, les salió perfecto”, reflexionó el arquero.
La competencia y la presión de ser el número uno
La competencia en el Barcelona se intensificó cuando Bravo fue el elegido para la titularidad en La Liga, mientras que Ter Stegen tuvo que conformarse con 21 partidos entre la Champions League y la Copa del Rey. Una situación que lo llevó a contemplar seriamente su salida del club. A pesar de que disputó algunas victorias en la liga, su frustración creció.
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«Le respondí que, por un lado, lo agradecía mucho, pero, por otro, quería ser el número uno», confesó Ter Stegen al recordar la conversación final con Luis Enrique, su entrenador en ese tiempo. Cuando el míster le sugirió que «veríamos cómo iba la pretemporada», el portero no pudo contenerse y mantuvo firme su deseo de ser el titular indiscutido.
El desenlace feliz de la historia
Luis Enrique puso fin a las dudas, aclarando que Ter Stegen no podría dejar el Barcelona bajo ninguna circunstancia. Curiosamente, solo tres semanas después de estas charlas, Guardiola fichó a Claudio Bravo para el City. “Al principio fue extraño, pero luego me alegró saber que no me iría y que al final me convertí en el número uno del equipo”, afirmó el guardameta.
Desde entonces, la carrera de Ter Stegen en el Camp Nou ha sido espectacular. Con más de 420 partidos disputados, se establece como uno de los pilares del equipo. Su dedicación y talento no solo lo llevaron a ser el capitán del club en 2024, sino que también le ganaron un lugar en la historia reciente del fútbol español.
Mirar atrás y analizar cómo Ter Stegen casi se convierte en ciudadano de Manchester es una anécdota cautivadora. Un recordatorio de lo impredecible que es el mundo del fútbol, donde los destinos pueden cambiar en un instante y donde cada conversación puede llevar a un giro de 180 grados en la carrera de un jugador. De esta forma, el actual capitán del Barcelona sigue demostrando que su ambición es uno de sus mayores talentos. ¿Quién sabe qué otra historia de este calibre nos tiene reservado el futuro?
