Tres partidos consecutivos sin ganar en casa: El Arsenal cede ante el Bournemouth en el Emirates

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El Arsenal ha sufrido una nueva derrota en casa al caer 1-2 frente al Bournemouth, encajando una remontada tras un gol inicial de Declan Rice. Mikel Arteta alineó a sus titulares desde el inicio, pero su equipo no logró mantener el ritmo en la segunda mitad, permitiendo al Bournemouth aprovechar la debilidad de los londinenses y silenciar el Emirates.
Inicio titubeante
Con la derrota ante el PSG aún fresca en la memoria, el Arsenal comenzó a medio gas. Aunque el Bournemouth no amenazó en los momentos iniciales, los ‘gunners’ comenzaron a encontrar su ritmo, especialmente por la banda izquierda con las incursiones de Martinelli. El brasileño consiguió varios disparos, aunque desviados, y los locales tomaban control del partido.
A los 15 minutos, Evanilson tuvo una clara oportunidad con un cabezazo que pasó rozando el larguero de Raya. Se sentía en el aire que el Arsenal estaba cerca de abrir el marcador.
La chispa de Rice
Cinco minutos después, Trossard estuvo a punto de marcar de cabeza, pero el portero Kepa salvó en la línea. Finalmente, en el minuto 35, un pase magistral de Odegaard dejó a Rice solo ante Kepa. Con una jugada de habilidad, Rice regateó al guardameta y puso al Arsenal por delante. La celebración de Arteta en el banquillo reflejaba la intensidad del momento. El Arsenal cerró la primera parte en ascenso.

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Bournemouth al contragolpe
La segunda mitad comenzó con los ‘gunners’ buscando un segundo gol, pero la falta de acierto y un inspirado Kepa mantuvieron la ventaja mínima. Como un trueno inesperado en un cielo despejado, el Bournemouth empató con un cabezazo de Dean Huijsen tras un saque lateral. El Emirates enmudeció.
Remontada dramática
Motivados por el gol, los visitantes se adueñaron del juego. En un saque de esquina, Evalinson dio la vuelta al marcador, lanzando al Arsenal al abismo de la incertidumbre. Aunque el VAR revisó una posible mano, el gol fue validado, añadiendo más drama a la tarde londinense.
El equipo de Arteta, exhausto y sin ideas, no logró inquietar de nuevo a Kepa. Con rostros serios y minutos que se desvanecían, una pequeña crisis golpea a los ‘gunners’ en un momento crucial, justo antes de visitar París para luchar por un puesto en la final de la Champions League.
