Por si quedaba alguna duda tras las palabras de Borja Jiménez, el Leganés –junto a algunos de sus jugadores– subrayaron con claridad su frustración con lo ocurrido en el Santiago Bernabéu. El conjunto ‘pepinero’ cree haber sido perjudicado en cuatro jugadas polémicas, todas ellas decisiones de González Fuertes que favorecieron al Real Madrid, inclinando la balanza contra los visitantes.
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La controversia en el césped
Las jugadas en el ojo del huracán fueron el penalti de Óscar sobre Güler y la supuesta falta de Renato Tapia sobre Rodrygo, esta última previa al tercer gol que firmó Kylian Mbappé para los blancos. Además de estas acciones, el Leganés protestó por dos caídas en el área, protagonizadas por Diego y Diomande, en sus duelos con Bellingham y Asencio respectivamente. La tensión bullía como una caldera al rojo vivo en el estadio.
La reacción en redes: un ruedo digital
Durante el partido, el Leganés no tardó en expresar su disgusto. En la red social ‘X’, tras el penalti señalado a Arda Güler, el club publicó un sencillo pero tajante «Qué», como un alfiler directo al corazón del enojo. Más tarde, al no pitar un posible penalti de Asencio sobre Diomande, el club posteó un emoji con una cara de vergüenza, un gesto claro de desaprobación.
Una fotografía que dice más que mil palabras
Terminada la contienda, el Leganés añadió una foto que hablaba por sí sola, mostrando el contacto de Asencio con un jugador del Leganés, acompañada de un emoji de circunstancias. También compartieron un comentario que rezaba: «Y encima hoy nos roban también una hora…», aludiendo al cambio de horario, con ironía palpable.
Voces desde el vestuario
Con las aguas algo más calmadas tras el partido, Enric Franquesa, lateral izquierdo del Leganés, lanzó su opinión en ‘X’. Citó un vídeo de la controvertida falta de Renato Tapia sobre Rodrygo, aderezando su comentario con emojis de carcajadas. Esta reacción dejaba en claro su incredulidad por la decisión arbitral que, además, les costó una tarjeta amarilla. Una vez más, la pasión y la controversia se entrelazan en el mágico mundo del fútbol, donde cada jugada se convierte en un capítulo épico digno de una novela.
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