El presidente del Villarreal, Fernando Roig, ha manifestado este martes su firme postura en contra de la idea de la Superliga europea, promovida por clubes como el Real Madrid y el Barcelona. Para Roig, la esencia del fútbol se encuentra en la competencia abierta y los modelos actuales de torneos nacionales y continentales. Como un piloto que confía en los vientos conocidos, apuesta por el sistema vigente y no por las aguas inexploradas de una Superliga.
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Una Liga de Campeones renovada
Roig, quien habló durante el brindis navideño del Villarreal, expresó su satisfacción con la actual competición europea, comparándola con un reloj que recién ha comenzado a funcionar: «Yo no veo una Superliga, no creo en ella en absoluto. Yo creo en la competencia», dijo con convicción. Confía en el formato presente de la Liga de Campeones, observando cómo evoluciona esta temporada desde la fase de grupos hasta las eliminatorias, con la expectación de un niño en la víspera de Reyes.
Un modelo basado en el mérito deportivo
A su juicio, el modelo de la Euroliga de baloncesto tampoco es el más adecuado, ya que, según él, las plazas deben ganarse en el campo y no asegurarse de antemano. Para Roig, el deporte es como una alfombra mágica: solo con esfuerzo y habilidad se puede volar alto. «Los que se lo ganen deportivamente en la cancha» deberían ser quienes participen, sentenció.
Progreso, cantera y orgullo local
Roig también subrayó la importancia de mantener un fuerte control económico, infraestructura de calidad y equipos competitivos. Para él, el progreso del fútbol es como una sinfonía bien orquestada: cada elemento debe estar perfectamente afinado. «Lo que había hace 15 años y lo que hay ahora, no tiene nada que ver», añadió, señalando el avance experimentado.
En cuanto a la cantera, su visión es clara: son los clubes, no las federaciones, los que impulsan su desarrollo. «La cantera y el fútbol español suben gracias a nuestro esfuerzo», afirmó Roig. Al final, en un suspiro de reconocimiento, señaló que aunque otros puedan colgarse medallas, son los clubes los que realizan el gran esfuerzo económico.
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Con estas declaraciones, Fernando Roig refuerza su visión de un fútbol más justo y competitivo, donde cada equipo pueda alcanzar el éxito a través de su mérito y esfuerzo. Como un capitán que no abandona su barco, Roig se mantiene firme en sus convicciones, guiando al Villarreal con pasión y orgullo.