La Real Sociedad cerró el mercado de fichajes el pasado 1 de septiembre con la ilusión y la garra de quien busca conquistar de nuevo las posiciones europeas. Con un gasto de 21,5 millones de euros, el club ha puesto toda la carne en el asador tras las dolorosas salidas de Imanol Alguacil y Zubimendi. En un sprint de locura antes del cierre, llegaron refuerzos de renombre para apuntalar la plantilla.

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Refuerzos de Alta Escuela
Erik Bretos, director deportivo de la Real, se movió como pez en el agua al incorporar a cuatro futbolistas valiosos durante el verano. La inversión se desglosa en once millones para Yangel Herrera, seis para Carlos Soler, cuatro para Gonçalo Guedes y 500.000 euros en Duje Cáleta-Car, central que llega del Lyon con una opción de compra futura. Estas cifras, aunque alejadas de los deseos iniciales para la defensa, marcan un camino claro hacia el futuro.
El Flanco Defensivo: Una Partida de Ajedrez
Bajo la dirección de Francisco Ramos, el equipo ha cubierto con habilidades quirúrgicas los huecos creados por las salidas de Zubimendi, Olagasti, Urko, Jon Pachecho y Javi López y el regreso de Aguerd a su club de origen. Aunque la recta final del mercado dejó pendientes las incorporaciones prioritarias de Igor Julio y Nayef Aguerd, la emoción y la incertidumbre hicieron vibrar a la afición.
Operaciones en la Puerta del Vestuario
En el caso del zaguero brasileño, Bretos estuvo persiguiendo a Igor Julio del Brighton, en una negociación tan complicada como un rompecabezas. Sin aceptar cesiones, el club inglés solo contempló traspasos, dejando a la Real Sociedad mirando cómo West Ham posicionaba sus cartas. Finalmente, de manera sorprendente, los ‘Gunners’ se llevaron a Igor prestado, con la directiva del Brighton prefiriendo mantener al jugador en la Premier para foguearlo mejor.
Por su parte, el conocido Agüerd dejó su huella en Anoeta durante su cesión en 2024. Sus actuaciones, sólidas como un roble, se vieron truncadas por una lesión que cerró su temporada. Sin embargo, cuando la Real intentó nuevamente hacerse con sus servicios, el West Ham fue un hueso duro de roer, buscando recuperar los 35 millones invertidos en su fichaje desde el Rennes en 2022.

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Con el telón bajando en el mercado de fichajes, la Real Sociedad busca escribir una nueva historia en Europa, con la esperanza encendida como una antorcha en manos de sus nuevos guerreros.
