En una noche de infarto en Montjuïc, el Barça no solo consiguió una victoria crucial contra el Celta al remontar un desafiante 1-3 para finalizar con un emocionante 4-3, sino que también dejó una vibrante declaración ante el eterno rival, el Real Madrid. Los culés, con un espíritu indomable y un corazón de leones, lograron dar la vuelta al marcador en los últimos compases del partido, culminando con un gol de penalti de Raphinha, que levantó a los aficionados de sus asientos.
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El peso de la victoria
La victoria no solo posiciona al Barça con firmeza en la carrera por LaLiga, sino que también lanza una larga sombra sobre el Real Madrid, que se enfrenta a su compromiso ante el Athletic Club con la presión de no tropezar. Si los de Ancelotti flaquean, podrían ver cómo las luces del título se apagan en una semana crítica donde ya sufrieron la eliminación de la Champions League.
Una semana para el olvido en la capital
Las redes sociales del club azulgrana no tardaron en avivar el fuego, recordando el tropiezo reciente del Real Madrid frente al Arsenal. Tras un revuelo en la capital sobre una posible remontada épica en el Santiago Bernabéu, el equipo blanco cayó 1-2, sellando su salida del torneo estrella del continente, como quien ve cómo la arena se escapa entre los dedos.
El Barça no dudó en lanzar un guiño provocador con un tuit con una foto de Gavi y Raphinha, acompañada de la frase: «Doncs sí que era setmana de remuntada», un sutil pero afilado recordatorio de que la remontada real solo se vivió en Montjuïc.
Un toque de humor y rivalidad
No satisfecho con un solo golpe, el responsable de las redes del Barça, con picardía y un toque picaresco, lanzó otro mensaje irónico: «Tutorial de com remuntar un partit», lanzando un guiño a los esfuerzos fallidos de su rival en su intento de remontar ante los londinenses.
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El horizonte del Madrid
El Real Madrid ahora enfrenta la prueba de fuego en sus últimas cartas de la temporada: LaLiga, donde marcha con siete puntos de desventaja (aunque con un partido menos), y la Copa del Rey, donde el destino quiere que el próximo capítulo de este drama futbolístico se escriba en el verde de La Cartuja el próximo sábado 26 de abril. Además, un último clásico en el calendario podría ser la batalla definitiva que decida el destino de la Liga. En estos próximos encuentros, ambos equipos caminarán como equilibristas sobre el alambre, sabiendo que cualquier paso en falso puede ser fatal.
