Arabia Saudí sigue tejiendo su red en las estrellas del Real Madrid, el gigante del fútbol europeo que intenta defender su fortaleza de los insistentes ataques del desierto. La liga saudí se erige como un coloso financiero, tambaleando los cimientos del club blanco con su deseo irrefrenable de llevarse piezas clave de su rompecabezas de talento.
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La caza de talentos: de los veteranos a las jóvenes promesas
En los últimos tiempos, nombres ilustres como Benzema, Nacho y Joselu han seguido el camino hacia Arabia tras colgar la camiseta madridista. No obstante, el objetivo saudí ha evolucionado y ahora fija su mirada en sangre más joven, futbolistas que aún marcan goles y paradas con el Real Madrid: la joya de la corona hoy es Vinicius, cuyo nombre resuena como un himno entre los muros del proyecto árabe. Aunque el brasileño permaneció vinculado al Real Madrid tras el último asalto veraniego, la lucha está lejos de acabar. Vinicius es visto como sucesor de un trono que Neymar, con su fichaje frustrado, dejó vacante.
Courtois en el radar: la nueva apuesta del desierto
Pero como reza el dicho, «quien da primero, da dos veces», y el nuevo as en la manga de Arabia es Thibaut Courtois. La idea es clara: enlistarlo como una de las figuras principales de su liga para la temporada 25-26. Courtois, con un año de contrato aún por cumplir, se encuentra en el ojo del huracán, con el Real Madrid dispuesto a renovarlo, aunque las conversaciones formales todavía no han comenzado.
Un cheque en blanco para el guardameta
El potencial económico de Arabia Saudí es casi mítico, capaz de hacer temblar hasta el más férreo de los compromisos. A sus 33 años, Courtois podría recibir una oferta tan brillante como un oasis en medio del desierto. En el ajedrez del fútbol, cada movimiento es crucial y el futuro del belga promete ser una partida que mantendrá a todos en vilo.
