Arturo Vidal no jugará la Copa América, el torneo que ganó en dos versiones históricas: la convencional, en 2015, y la Centenario, en 2016. Esos logros inmortalizaron su nombre en la historia de la Selección Chilena y del fútbol nacional. El volante de Colo Colo, de hecho, ha sido todo un personaje orgulloso en pavonearse con estos triunfos, al punto de despertar resquemores en el resto de Sudamérica, donde primero lo vieron como soberbio y, luego, esperaron cualquier tropiezo, suyo o de la Roja, para echárselo en cara.
Un rey sin corona en esta ocasión
El Rey Arturo siente con fuerza su conexión con la Selección. De hecho, él siente que la Selección le pertenece. No es para menos, ya que fue pieza clave en la conquista de los dos únicos trofeos importantes que la Roja exhibe en su vitrina.
En esa línea, Vidal siempre ha considerado los logros con la Roja como parte de su propia historia. Sin ir más lejos, tiene réplicas de ambos trofeos en su casa y no duda en mostrarlos con orgullo. Ahora, fuera de la selección por decisión de Gareca e imposibilitado de aspirar a un tercer título, Arturo recuerda la importancia de su papel en las conquistas pasadas.
El clamor de Arturo en redes
A través de su cuenta de Instagram, que muchas veces ha sido su campo de batalla para expresar opiniones o molestias, Vidal reivindica su lugar en la historia. Lo hace de manera contundente: muestra una réplica del trofeo de la Copa América 2015 con un mensaje que no deja lugar a dudas: “Mía”.
En el lenguaje propio de las redes sociales, añade dos emojis: una copa y una señal de sarcasmo. La imagen es completada por la indumentaria de entrenamiento de Colo Colo, que luce el número 23, el cual ha sido testigo de varios de los capítulos más gloriosos de su carrera.
Con esa publicación, Arturo Vidal, el gladiador del medio campo, busca reafirmar su lugar en el olimpo futbolístico chileno. Pese a la herida abierta de no estar en la próxima cita continental, su legado sigue imborrable en la retina de los hinchas. ¡Grande, Rey Arturo!