Deportivo Cali y Millonarios protagonizaron un auténtico novelón futbolístico, digno de una telenovela. Mientras los hinchas esperaban con ansias saber más, los detalles finales se mantenían ocultos tras una cortina de misterio.
Un objetivo común: un mismo jugador
Ambos clubes tenían la mira puesta en el mismo crack para la Liga BetPlay II 2024. Sin embargo, solo uno de ellos logró escribir un final feliz en esta trama llena de intriga, donde hubo incluso insinuaciones de traición.
El giro inesperado: ¿quién se llevó el premio?
El protagonista de esta historia fue el arquero Iván Mauricio Arboleda, quien había llegado a Deportivo Cali, se sometió a exámenes médicos y acordó todos los detalles. Pero justo en el último momento, cuando todos esperaban su firma, Arboleda decidió echarse para atrás.
Arboleda: de verde a azul
¿Qué pasó después? Arboleda fue presentado como el gran refuerzo de Millonarios, tomando el lugar de Álvaro Montero al comienzo de la actual Liga. Aunque venía de ser figura en Banfield y había pasado por Newell’s Old Boys y el Anorthosis de Chipre, sus primeras actuaciones en el equipo azul fueron un sube y baja, desde buenos rendimientos hasta una expulsión polémica ante Atlético Nacional (1-2), situación que dejó un sabor amargo entre los hinchas capitalinos.
El porqué del cambio de camiseta
El verde del Cali lo tenía todo listo, por pedido expreso del técnico Hernán Torres. Sin embargo, el presidente del club azucarero, Humberto Arias, reveló el verdadero motivo tras este cambio de escenario. «La verdad de Arboleda es que se fue para Millonarios porque le ofrecieron un mejor contrato», confesó Arias en una entrevista. Así de sencillo, fue la propuesta económica la que inclinó la balanza.
Una decisión laboral
Como corresponde a cualquier trabajador, Arboleda tomó la decisión basada en la mejor oferta salarial. Solo el tiempo dirá si eligió correctamente y si Millonarios fue el mejor destino para su carrera.
La novela del fútbol colombiano sigue escribiéndose semana a semana, y estas decisiones, con sus giros y vueltas, son las que mantienen la pasión y el drama en el deporte rey.