Deportivo Cali sufrió una dura derrota ante Independiente Santa Fe, que lo dejó sin posibilidades de clasificar a los cuadrangulares de la Liga Betplay 2025-I. El encuentro, disputado en el estadio Palmaseca, terminó con un marcador de 0-2, lo que encendió las alarmas en el equipo azucarero.

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Un partido decepcionante
El conjunto local tuvo momentos en los que pudo marcar, pero no supo aprovechar las oportunidades. Por el contrario, el equipo bogotano demostró ser más contundente, asegurando su clasificación gracias a los goles de Iván Scarpeta y Edwar López. Es difícil ver cómo un equipo con historia y tradición se queda a las puertas del siguiente paso, pero así es el fútbol: impredecible y a veces cruel.
Reflexiones de Alfredo Arias
Tras el pitido final, el entrenador Alfredo Arias se presentó ante los medios en rueda de prensa, compartiendo sus pensamientos sobre la dolorosa eliminación. “Adolecimos de lo mismo que nos viene pasando. Jugamos un buen primer tiempo, pero no la metimos. En la primera jugada que ellos llegan al arco, nos hacen el gol”, expresó, mostrando su tristeza y desconcierto.
La frustración era evidente en su voz. “Tristeza, desazón, porque no logramos el objetivo que nos habíamos trazado. La imagen que dejamos desde los 30 minutos es que estábamos desarbolados, e intentamos ir por el gol como fuera”, manifestó el técnico.
La continuidad de Arias en el club
La incertidumbre sobre su futuro también flotó en el ambiente, y Arias no eludió la pregunta. “Tienen que entender que no puedo contestar ese tipo de preguntas. Espero que la próxima semana me agarre con salud, que esté fuerte, que mi familia esté bien… eso es lo que espero. Hacer suposiciones de si sigo, si voy a tener trabajo o no, no depende de mí”, afirmó, dejando entrever que la continuidad no solo es cuestión de deseo personal.

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Autocrítica y desafíos
Arias fue claro al asumir la responsabilidad por los resultados del equipo esta temporada. “Soy responsable, los jugadores también, de estar hasta esta fecha con posibilidades de clasificar. Estamos en un equipo muy grande, pero hoy es un equipo pobre”, declaró, haciendo referencia a la situación actual que vive Deportivo Cali.
El mensaje es contundente: “Todo el mundo piensa que se puede competir, aunque haya carencias, y creemos que con la camiseta, el nombre, las ganas y dejando todo en la cancha se alcanza, pero a veces no es suficiente”. Sin duda, un llamado a la reflexión para todos los involucrados en el club.
La voz de los hinchas
El encuentro no solo dejó secuelas en los jugadores y cuerpo técnico, sino también en los hinchas. Una fuerte reacción se notó en las gradas del Palmaseca, donde los aficionados no dudaron en expresar su descontento. Ante esto, Arias respondió: “Yo estoy acá porque quise y no estoy arrepentido. Pero tengo memoria, y aunque a muchos no les gusta que yo les recuerde los últimos semestres, puedo aceptar que alguien me critique, pero me duele que me insulten a los 10 minutos. Me quedo porque quiero, no me retiro de ninguna cosa, y jamás en mi vida lo he hecho”.
Mirando hacia el futuro
Ahora, la gran pregunta es: ¿qué pasará con Deportivo Cali? La eliminación significa un momento de introspección para un club con tanta historia y dónde cada temporada se esperaba un mejor desempeño. Los hinchas, que siempre han mostrado su pasión y lealtad, merecen respuestas y un equipo que luche por la victoria.
La situación, por difícil que sea, puede servir como un punto de inflexión. ¿Acaso será el tiempo de reestructurar, de tomar decisiones difíciles y de volver a soñar? El fútbol es un ciclo, y Deportivo Cali tiene la oportunidad de aprender de este revés. Es el momento de demostrar que, aunque esta ha sido una temporada complicada, las próximas podrán ser mejores.
Finalmente, el deporte que amamos siempre nos deja lecciones, y esta no es la excepción. Los errores pueden ser dolorosos, pero también son oportunidades para crecer. La afición sigue esperando, y ahora más que nunca, el grito de aliento debe resonar con fuerza para el futuro. ¡Vamos, Cali!
