Cuando el Campeonato Nacional se acerca a su desenlace, ¡la presión se siente en cada esquina del campo de juego! Para quienes sueñan con alzar el Huemul de Plata, cualquier desliz puede ser fatal. Ese es el dilema que enfrenta actualmente la Universidad de Chile, que a pesar de haber dominado la tabla durante gran parte del año, ahora no tiene el control total sobre su destino. El doloroso tropezón en Iquique dejó una huella imborrable, pero una chispa de esperanza se encendió con su reciente triunfo sobre Unión La Calera, imponiéndose por la mínima con un gol de 1-0.
Una verdadera prueba para los azules
El choque contra los cementeros era más que un simple partido; era un examen de fortaleza y carácter para los dirigidos por Gustavo Álvarez. Con el eterno rival, Colo Colo, pisándoles los talones y sin haber saboreado la derrota en la segunda rueda, la presión sobre la U era palpable. Sin dudas, algunos hinchas comenzaban a mostrar un insólito pesimismo, como si el campeonato ya estuviera perdido.
Un cambio táctico acertado, con la ausencia del suspendido Leandro Fernández, llevó a Álvarez a ajustar las piezas. Nicolás Guerra hizo dupla en la delantera con Cristian Palacios, y se optó por una línea de tres defensores, liberando a los laterales Hormazábal y Morales con roles casi de extremos. Esta disposición táctica abrió el campo como un abanico y permitió un juego más dinámico.
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Motivo revelado: Piero Maza ausente en la próxima jornada del Campeonato NacionalEl desarrollo del encuentro
Desde el pitazo inicial, la U tomó las riendas del partido, dominando a La Calera aunque esa superioridad no se tradujo en una cascada de oportunidades de gol en la primera mitad. Los visitantes optaban por lanzamientos largos hacia su delantero centro, David Romero, buscando ganar terreno a base de choque y fuerza.
Marcelo Morales, el hombre clave, revitalizó el ataque azul cada vez que conseguía el balón, desbordando como un rayo y generando peligro constante. Sin embargo, carecía de precisión en el último pase, ese toque final que puede desmantelar cualquier defensa. En el minuto 28, el «Chorri» Palacios tuvo su oportunidad, pero su disparo se fue desviado.
La emoción del gol y lo que vino después
¡Por fin llegó la alegría al minuto 38! Fabián Hormazábal rompió el marcador con un gol que nacía de un pase preciso de Matías Zaldivia, quien vio el espacio y soltó un balón teledirigido a espaldas de la defensa rival. Hormazábal, convocado a la selección por Gareca, no perdonó y definió con clase. La U dominaba, pero ese 1-0 aún no bastaba para calmar los nervios. ¿Podría resistir ante cualquier infortunio que se presentara?
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Cobreloa busca fichaje estrella: histórico mediocampista de U. de Chile en la miraEn la segunda mitad, los dirigidos por Walter Lemma intentaron una postura más audaz, aunque sin mayor éxito en el área azul. La U, por su parte, ajustó con cambios tácticos, ingresando a Sepúlveda y Assadi para refrescar el ataque, y casi logró ampliar la ventaja cuando Hormazábal estrelló un tiro en el poste al minuto 66.
Finalmente, el triunfo no solo representó tres valiosos puntos, sino también trasladó toda la presión al Cacique, que se mide este domingo ante Audax Italiano. Con 58 puntos en la bolsa y con una ventaja de siete, aunque con tres partidos menos que los albos, la U sigue en la carrera por el título.
El resumen del encuentro:
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Árbitra se Prepara para su Gran Debut en el Estadio Nacional- U. de Chile: G. Castellón; F. Formiliano, F. Calderón, M. Zaldivia; F. Hormazábal, M. Guerrero (83′, I. Poblete), M. Díaz, Ch. Aránguiz, M. Morales (60′, M. Sepúlveda); C. Palacios (74′, L. Pons) y N. Guerra (60′, L. Assadi). DT: G. Álvarez.
- U. La Calera: J. Peña; R. Rebolledo (87′, M. Muñoz), E. Ferrario, N. Brunet, D. Ulloa; A. Álvarez Wallace (88′, A. Encinas), P. Parra (87′, A. Henríquez); R. Huerta (55′, E. Valencia), F. Soldano, M. Cavalleri (87′, W. Ponce); D. Romero. DT: W. Lemma.
Gol: 1-0, 38′, Hormazábal.
Árbitro: F. Gilabert.
Una noche mágica en el Estadio Nacional, abarrotado con 41.221 almas alentando sin parar, orando por un cierre de campeonato que promete ser de infarto.
