En un intenso enfrentamiento por los octavos de final de la Copa Libertadores, el Fluminense no logró mantener su ventaja inicial y terminó cayendo 2-1 ante Grêmio en Porto Alegre.
El partido fue equilibrado desde el inicio, con ambos equipos mostrando su capacidad ofensiva y solidez defensiva. Sin embargo, los errores individuales marcaron la diferencia en este crucial duelo.
Fluminense Domina el Inicio, pero Grêmio Responde
El Fluminense, dirigido por Mano Menezes, comenzó el encuentro con una actitud agresiva y dominante. Con Ganso orquestando el juego desde el medio campo, el equipo carioca se adelantó en el marcador con un gol de Lima a los 58 minutos, tras una brillante jugada colectiva que dejó a la defensa de Grêmio desorientada.
A pesar del gol, la lesión de Martinelli obligó a Menezes a realizar cambios que afectaron la dinámica del equipo. Luego del cambio obligado, el equipo perdió un poco de cohesión en el medio campo. Este cambio le dio a Grêmio la oportunidad de recuperar terreno, y los errores empezaron a surgir.
GANHAMOS! #Grêmio 2×1 Fluminense
Começamos as oitavas de final da #Libertadores2024 na frente! Com dois gols de Reinaldo, vencemos a equipe do Fluminense no Couto Pereira. VAMOOOOOOOSSS!!!!
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Los Errores que Costaron el Partido
El lateral izquierdo de Fluminense, Esquerdinha, tuvo una noche para el olvido. En un momento de confusión, cometió un penalti, lo que permitió a Reinaldo empatar el partido desde los 11 metros a los 74 minutos. Este golpe fue un duro revés para Fluminense, que hasta ese momento parecía controlar el juego.
No obstante, el equipo carioca continuó buscando el gol de la victoria, pero otra falta de Esquerdinha resultó en un tiro libre peligroso para Grêmio. Reinaldo nuevamente fue el verdugo, con un tiro perfecto que superó al portero Fábio, poniendo a Grêmio en ventaja al minuto 78.
Un Final Agrio para Fluminense
A pesar de tener un jugador más tras la expulsión de Rodrigo Ely en el minuto 85, el Fluminense no pudo revertir el marcador en los minutos finales. La presión de Grêmio y la solidez defensiva fueron suficientes para contener los ataques cariocas, dejando a Fluminense con una complicada tarea para el partido de vuelta en el Maracanã.