La adrenalina sigue corriendo por las venas tras un partido donde el corazón dejó todo en la cancha. Enzo Pérez, el emblema y capitán indiscutido de River Plate, salió a dar la cara después del último encuentro, dejando claro que, a pesar del esfuerzo, aún queda mucho camino por andar en el proceso de maduración del equipo. “Todavía nos falta juego, más de nosotros”, afirmó con esa claridad que solo los grandes líderes pueden tener. ¡Y cómo no ser duro al hablar así cuando el tiempo apremia y el título está a la vuelta de la esquina!
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El pulso del partido
El partido pasado fue un verdadero himno al fútbol. Con un primer tiempo incendiario, el Millonario dejó destellos de calidad con jugadas que tuvieron a la hinchada al borde del asiento. Borré y Palavecino se movían como flechas en el ataque, pero la precisión en el último toque fue como un susurro perdido en el viento. Y ahí estaba Enzo, desde el mediocampo, haciendo malabares entre la presión rival y la necesidad de construir juego, como si no fuera suficiente correr de un lado a otro mientras sus compañeros aún buscaban la sincronía perfecta.
La voz del líder
En su declaración, Pérez no anduvo con rodeos. “Sabemos que tenemos el potencial para más, pero hay que hacerlo realidad”, dijo con ese brillo en los ojos que solo se encuentra en los verdaderos guerreros. Enzo se refirió a la falta de fluidez en el juego que, en los momentos decisivos, puede marcar la diferencia entre ser un gladiador o un espectador. “No estamos en la cima de la montaña aún, nos falta encontrar el ritmo, esa energía que nos haga un equipo imparable”, sentenció.
La búsqueda de identidad futbolística es una carrera larga, y nuestros guerreros en la cancha están decididos a no desfallecer. Cada pase fallido, cada tiro desviado, son lecciones grabadas a fuego, una oportunidad para levantarse más fuerte. ¡Vamos, que esto es fútbol argentino y siempre hay que dar el máximo! ¡Basta de dudar! La pasión que reside en cada rincón del Monumental es el viento que eleva a este equipo hacia sus sueños.
Así que, de cara al próximo desafío, la frase de Enzo resuena como un mantra: “Más juego, más de nosotros”. Que el ritmo se sienta, que la conexión surja, y que, en el próximo encuentro, el fútbol que fluya sea tan hermoso como una obra maestra. ¡Vamos, River! ¡A dejarlo todo, siempre!
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