¡Qué noche inolvidable en tierras albanesas! En un partido que quedará grabado en la memoria de los hinchas, Albania sorprendió a la mismísima Italia con un gol rapidísimo, el más veloz en toda la historia de la Eurocopa. Apenas sonaron los primeros ecos del silbato inicial, ¡y ya estábamos gritando gol!
Un gol para la historia: un rayo fulminante
Con tan solo 8.1 segundos en el marcador, la joven promesa albanesa, Xhuliano Skuka, dejó a todos boquiabiertos con una definición impecable. Fue como si el balón tuviera imán hacia la red. Un pelotazo desde el mediocampo que descolocó a una defensa italiana que parecía todavía soñolienta. Con la frialdad de un experimentado y la velocidad de un rayo, Skuka la mandó a guardar de un zurdazo que retumbó en las tribunas. ¡Qué golazo, mamá mía!
Italia, dormida y sin respuestas
Il Calcio, siempre conocido por su estrategia y solidez defensiva, parecía un equipo desconocido. Los de Roberto Mancini intentaron reaccionar, pero se toparon con una muralla defensiva albanesa que no dio tregua. Fue un constante ¡pum! ¡pum! de rechazos y cortes impecables; Albania jugó un partidazo en cada rincón del campo.
Pinceladas de fútbol puro
- En el minuto 20, casi lo empata Immobile con un remate que pegó en el travesaño y salió despedido como un cohete.
- A los 35, una tapada monumental del arquero albanés, Berisha, dejó a todos pasmados. ¡Qué reflejos, pibe!
- El segundo tiempo fue un show defensivo albanés, con cortes quirúrgicos y anticipos como si fueran coreografiados.
Final con sonrisa albanesa
El complemento fue una batalla campal, las piernas pesaban y las emociones estaban al borde del caos. Italia buscó y buscó, pero no encontró. Cada balón que pasó por el área fue rechazado, y cada ataque fue contenido con una garra que ya es marca registrada de los albaneses. ¡Una noche de gloria, sin lugar a dudas!
¿Quién se iba a imaginar un desenlace así? La Eurocopa siempre nos tiene guardadas estas perlitas de fútbol que llenan el alma. ¡Viva el fútbol, carajo!