México y Corea del Sur ofrecieron uno de los duelos más esperados, sobre todo después de que la Selección Mexicana no dejara la mejor impresión frente a Japón. El encargado de liderar la búsqueda del empate fue Santiago Giménez, quien dejó todo en la cancha. Descubre aquí lo que sucedió.
Duplica tu depósito hasta $200.000 en apuestas y casinos bono de bienvenida
Raúl Jiménez: El Depredador del Gol
El delantero Raúl Jiménez volvió a brillar al marcar contra Corea del Sur, acercándose peligrosamente al récord de Javier «Chicharito» Hernández. Con la destreza de un felino cazador, Jiménez suma ya 43 goles con la Selección Nacional, ocupando un lugar destacado entre los goleadores históricos. Está decidido a superar a Jared Borgetti y tiene en su mira al legendario Chicharito.
Un Historial de Rivalidad
El historial entre México y Corea del Sur está lleno de duelos memorables. México ha salido victorioso en citas tan importantes como los Mundiales de Francia 1998 y Rusia 2018. Sin embargo, no todo ha sido miel sobre hojuelas, pues Corea del Sur logró eliminar a México en la Copa Confederaciones 2001, sumando una rivalidad picante. Con estos antecedentes, ambos equipos protagonizaron un choque lleno de intensidad.
El Partido: Un Vaivén de Emociones
Desde el arranque, México mostró intenciones claras de controlar el encuentro. Raúl Jiménez fue el encargado de abrir el marcador al aprovechar una oportunidad frente a la defensa de los “Tigres de Asia”. La anotación fue celebrada con entusiasmo por la afición, ofreciendo una bocanada de esperanza.
A pesar de la habilidad goleadora de Jiménez, Heung Min Son aprovechó un descuido del «Tala» Rangel para empatar el partido con un disparo fulminante. Minutos más tarde, Hyeon Gyu añadió más presión al cuadro mexicano con un gol que puso a Corea del Sur arriba en el marcador.
Duplica tu depósito hasta $200.000 en apuestas y casinos bono de bienvenida
Justo cuando parecía que el partido se inclinaba a favor de los asiáticos, Santiago Giménez apareció como un rayo de luz en el firmamento. En los minutos finales del encuentro, anotó el gol del empate con la determinación de un guerrero azteca, asegurando un resultado que llenó de confianza al delantero de cara a su temporada con el AC Milán.
Este encuentro fue una montaña rusa de emociones, dejando claro que la Selección Mexicana tiene carácter y talento para enfrentar importantes desafíos. Con cada gol y jugada, los sueños de avanzar en el fútbol mundial se mantienen vivos para el equipo tricolor.
