Toda una vida regresando de Madrid con las manos vacías. Pasando por la ribera del Manzanares, el Vicente Calderón, y ahora el Metropolitano, con promesas de «a la próxima será». Sin embargo, casi 57 años cargando derrotas frente al Atlético de Madrid. Pero este sábado, en pleno auge de las desigualdades económicas entre equipos, el Elche quebró la racha: un empate histórico en el feudo colchonero, que revive las viejas historias de gloria de los abuelos franjiverdes.
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Un Hito en la Historia
En la era de los avances tecnológicos que nos tientan a pasar por alto los momentos históricos, el empate del Elche en el Metropolitano brilla con luz propia. Es un segundo ejemplo de audacia esta temporada en Primera, reflejando cómo el equipo, osado y protagonista, igualó el marcador tras comenzar en desventaja. Ante el Betis, se vio un estilo similar: osadía y reacción.
Defensa de Corazón
En el segundo tiempo, el Elche fue acorralado por el tercer mejor equipo de la Liga. Sin embargo, con corazón y cabeza, aguantaron cuando las piernas flaqueaban, arañando un punto que parecía imposible. Un verdadero botín, un puntazo.
El Estreno de Rafa Mir
El partido comenzó con Eder Sarabia apostando por John en el once titular. Sin embargo, fue un riesgo mal calculado. Un galimatías táctico que no supo resolver terminó con un gol del local Sorloth ante la débil marca de John. Las dudas del joven crecieron, aunque evitó una clara ocasión en medio de la locura del primer tiempo.
En medio de ese manicomio con césped, Rafa Mir se estrenó como goleador, igualando el marcador poco después del gol del Atleti. Una jugada prodigiosa lanzada por Germán Valera y culminada por un pase excepcional a Mir que, de tiro cruzado, bate a Oblak. Tablas y emoción.
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Resistencia y Heroísmo
El desgaste físico y el oponente acorralaron al Elche tras la pausa de hidratación. Sin embargo, Affengruber emergió como un titán, anulando los intentos ofensivos de Sorloth y Julián Álvarez. El equipo se unió en defensa del empate.
Con el segundo tiempo ordenado y menos caótico, el Elche resistió los embates rojiblancos. Los cambios aportaron aire fresco, pero el marcador no cambió. Dituro heroico, bloqueando lo que su defensa no despejaba. En el minuto 97, la última oportunidad casi fue suya, pero sin el aliento suficiente, Valera no encontró la claridad.
Si los empates saben a victoria, los franjiverdes ya cuentan con dos sabores dulces en este inicio de temporada.
