Elvis Perlaza denunció insultos racistas del DT Gustavo Florentín en encendido partido en El Campín
El lateral derecho de Independiente Santa Fe, Elvis Perlaza, prendió el ventilador y denunció que fue víctima de insultos racistas por parte del estratega paraguayo Gustavo Florentín, quien dirige al Deportivo Pasto. Los lamentables hechos se dieron este miércoles 17 de julio, en el estadio El Campín, durante el electrizante triunfo 2-1 del cardenal en la primera fecha de la Liga BetPlay II-2024.
Comenzando el segundo tiempo, Perlaza fue derribado con fuerza en su propio campo. Pero lo que nadie esperaba era que el jugador de 35 años se levantaría como un rayo y cruzaría palabras con Florentín, sacando chispas en pleno gramado.
Amago de trifulca: calentura en la cancha
Inmediatamente, se armó un amague de pelea. Jugadores de ambos equipos se mezclaron en un remolino de empujones, palabras fuertes y miradas desafiantes. Incluso, Pablo Peirano, el técnico uruguayo de Santa Fe, tuvo que intervenir para calmar los ánimos. El árbitro Edilson Ariza no se hizo esperar y, con mano firme, mostró tarjeta amarilla a Perlaza y a los dos entrenadores, poniendo orden en medio del torbellino.
El testimonio de Perlaza
Finalizado el encuentro, tanto Perlaza como Florentín dieron sus versiones sobre lo acontecido. Pero el relato del lateral albirrojo fue especialmente impactante. El colombiano no dudó en denunciar los insultos denigrantes que recibió. “Me dijo ‘hijo de puta, párate, negro marica’ y la verdad me enfadó mucho. Le dije que tenía que dar ejemplo y respetar. Eso realmente me sacó de quicio. Uno lo piensa para no perjudicar al grupo, pero quería pegarle”, confesó Perlaza. Con visibles signos de indignación, agregó: «No se puede quedar en la cancha porque, ¿quién es el que da el ejemplo aquí? Siempre termina uno perjudicado. Toca aguantarse y seguir, no hay otra».
La versión de Florentín
Por su parte, Gustavo Florentín optó por no entrar en detalles espinosos y prefirió una postura diplomática durante la rueda de prensa: “Lo que sucede dentro del campo, termina ahí. La idea es inyectar carácter a nuestros jugadores, algo que nos faltó en el primer tiempo. Los jugadores me conocen en ese aspecto, y lo que pasó termina ahí”.
El fútbol pide respeto
Este tipo de episodios siempre dejan un mal sabor de boca en aficionados y protagonistas. En un deporte que apasiona a millones, la cancha debe ser un templo de respeto y convivencia. La Liga BetPlay II-2024 apenas comienza y ya nos ha regalado momentos de alta tensión. Esperamos que las lecciones aprendidas de este episodio sirvan para promover valores de respeto y deportividad en nuestro amado fútbol colombiano.
¡La pelota sigue rodando y con ella las emociones a flor de piel! ¡Que viva el fútbol, pero que viva limpio!