En un arranque electrizante, el equipo de Estados Unidos rápidamente tomó la delantera en la gran final de la Copa Oro 2025, pero fue México quien alzó la copa tras un emocionante duelo en Houston. El técnico estadounidense Mauricio Pochettino no tardó en manifestar su opinión sobre el polémico arbitraje que, desde su perspectiva, favoreció al Tri en su victoria.

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Un partido digno de final
Desde el primer silbatazo, los aficionados en el estadio vivieron un carrusel de emociones. Estados Unidos abrió el marcador con un espectacular cabezazo imparable, dejando sin oportunidad al arquero Luis Ángel Malagón. Sin embargo, como obra del destino, Raúl Jiménez igualó las acciones con un potente cañonazo, al más puro estilo de un huracán desatado.
Polemica en la cancha: ¿fue penalti?
El clímax del encuentro llegó con una jugada fortuita dentro del área mexicana. Jorge Sánchez protagonizó un momento controversial que desató las protestas del bando norteamericano. Pochettino y sus jugadores exigieron la intervención del VAR, pero el arbitraje decidió continuar sin sancionar penalti, encendiendo más los ánimos en la tribuna y el banquillo.
Declaraciones candentes de Pochettino
«No vengo a llorar», declaró Pochettino, aunque sus palabras dejaron entrever su inconformidad. «Si esto hubiera pasado en el otro extremo, seguro que habría sido penalti», sentenció el estratega, crítico del arbitraje y del supuesto sesgo en favor del Tri.
Finalmente, el fervor de los aficionados mexicanos en el estadio fue otro ingrediente que, según Pochettino, inclinó la balanza. «Qué importante son los fans», reconoció, insinuando que el apoyo desde las gradas pudo haber influido en el desarrollo del partido.

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Estados Unidos se va con la frente en alto, pero con el sabor amargo de la derrota, en un encuentro donde el fútbol, una vez más, demostró ser impredecible y apasionante como un torbellino.
