El mediocampista Luis Chávez, a pesar de haber confirmado una severa lesión en la rodilla, continúa acompañando a la Selección Mexicana durante la concentración de la Copa Oro 2025. En un acto que revela su compromiso, se le ha visto "entrenando" con el equipo antes del crucial encuentro ante Arabia Saudita en los cuartos de final.
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La inesperada presencia de Luis Chávez en el entrenamiento del Tri
En redes sociales, especialmente a través de un video compartido por ESPN, se observa a Luis Chávez portando con orgullo su uniforme de entrenamiento de la Selección Mexicana. Aunque limitado por sus condiciones, el jugador realiza algunos ejercicios ligeros mientras sus compañeros se preparan intensamente para el esperado duelo ante Arabia Saudita.
El guerrero incansable sigue adelante
El exmediocampista de los Tuzos también ha sido visto conversando con otros seleccionados. Aunque extraña la cancha, su esfuerzo físico es mínimo para no agravar su lesión, mientras su rodilla afectada sigue siendo un recordatorio constante de su lucha.
Decisión táctica del seleccionador y lucha personal de Chávez
El director técnico Javier Aguirre, entrenador reconocido por su estrategia y templanza, ha decidido mantener a Luis Chávez en el grupo a pesar de ser baja para la Copa Oro 2025. El mediocampista del Dinamo Moscú enfrenta una rotura de ligamento cruzado en su rodilla derecha, que lo mantendrá alejado de las canchas por al menos seis meses.
Chávez se mantiene al lado de su equipo
A pesar de todo, Chávez también acompaña al equipo en su viaje a Phoenix, donde este sábado, 28 de junio, la Selección Mexicana se enfrentará con Arabia Saudita con la esperanza de asegurar su lugar en las semifinales. Su presencia es un faro de motivación, un testimonio de fuerza en uno de los momentos más complicados de su carrera.
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Luis Chávez está a la espera de su cirugía, y más adelante se determinará cuánto llevará su rehabilitación. Con la mira puesta en el próximo Mundial 2026, el objetivo del jugador es claro: regresar al máximo nivel y luchar junto a la Selección Mexicana en el escenario mundial.
La esperanza sigue viva, como el rugido de un estadio lleno que nunca se apaga.
