El choque México vs República Dominicana podría jugarse sin afición debido a tensiones en Estados Unidos. Concacaf está considerando una medida radical: celebrar el partido a puerta cerrada. Esto se debe a la oleada de protestas provocadas por las políticas migratorias de Donald Trump, lo que ha llevado a la imposición de un toque de queda en Los Ángeles.

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Decisión drástica de Concacaf
Concacaf baraja la posibilidad de que el partido entre México y República Dominicana de la Copa Oro 2025 se celebre sin espectadores en el SoFi Stadium. Esta medida es una respuesta directa a las manifestaciones previstas por el cumpleaños del presidente Trump, que han impactado fuertemente la ciudad angelina.
Los Ángeles está viviendo momentos de película, con calles desiertas y un ambiente tenso que palpita como un gol en el último minuto. Ante este panorama, los aficionados del Tri se verían privados de apoyar en persona a sus héroes en el campo.
Impacto en la Selección Mexicana
La ausencia de la afición es un mazazo psicológico para los jugadores, acostumbrados a sentir el apoyo apasionado de su público. Las calles de Long Beach, normalmente festivas, ahora sienten el eco vacío de los cánticos ausentes debido a los disturbios en el centro de Los Ángeles.
El equipo de Javier Aguirre, sin embargo, mantiene su rumbo firme, como un delantero que encara al portero con determinación. Aunque están hospedados lejos del epicentro de las protestas, el ambiente de incertidumbre no deja de ser una carga pesada.

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Johan Vázquez: Un aliento en la tormenta
En medio de este mar de dudas, una noticia positiva viene como un respiro de aire fresco: Johan Vázquez estará presente en el torneo, desmontando rumores que lo dejaban fuera de acción. Esta confirmación es música para los oídos del cuerpo técnico que busca estrategias para enfrentar la Copa sin su fiel afición.
Sin duda, la posible decisión de un partido sin público es desalentadora, pero en el ADN del Tri está luchar contra viento y marea. La pasión no se apaga, aunque se juegue a puerta cerrada. ¡El espectáculo debe continuar!
